El primer ministro danés, Anders Fogh Rasmussen, y el canciller alemán, Gerhard Schröder, destacaron hoy en el 50 aniversario de las Declaraciones de Bonn y Copenhague el carácter modélico de estos acuerdos de defensa de las minorías. En un acto celebrado en el castillo de Soenderborg, al sur de Dinamarca, los dos jefes de gobierno elogiaron la convivencia pacífica de la minoría danesa con el resto de habitantes del estado federado alemán de Schleswig-Holstein y de la germana con los daneses de Soenderjylland (Nordschleswig en alemán). "Los conflictos fronterizos son cosas de los museos y ahí deben estar", dijo Rasmussen, quien elogió la "previsión y liderazgo" del primer ministro danés Hans Christian Hansen y de su homólogo alemán Konrad Adenauer al firmar los acuerdos que garantizan derechos a las minorías en las áreas educativa, lingüística y política.