Los militantes de la oposición siria anunciaron este martes (12.02.2013) la captura de la base militar aérea de Jarrah, cerca del aeropuerto de la ciudad de Alepo, tras duros combates con las fuerzas leales al régimen de Bashar al-Assad. Los rebeldes llevaban varias semanas rodeando la instalación, ubicada en una zona productora de petróleo.

Imágenes de video exhibidas por distintos canales de televisión mostraban a los combatientes del Movimiento Islámico Libre Sham inspeccionando el aeropuerto. En las escenas se pueden ver aviones de combate tanto en las pistas como en los hangares, en lo que significa el último gran triunfo de los rebeldes en su lucha por derrocar a Al-Assad.

Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una agrupación ubicada en Londres que dice obtener información imparcial desde Siria, la base capturada por los rebeldes contiene decenas de aviones de combate, entre ellos MIG-17 y Sukoi L39. CNN informó que también había aviones de entrenamiento y munición pesada.

Ya suman 70.000 los muertos

En los combates por el aeropuerto militar habrían muerto 40 soldados del Ejército sirio y dos de la oposición, según reportes de los rebeldes, que también reconocieron decenas de milicianos heridos, entre ellos varios de gravedad. La captura del aeropuerto supone un duro revés para Bashar al-Assad, en medio de una guerra civil que ya va a cumplir dos años.

Y no solo eso. Según la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, “posiblemente” el número de personas que han muerto como consecuencia directa de los enfrentamientos en Siria se acerca ya a los 70.000.

Hace menos de seis semanas la misma Pillay había cifrado las víctimas mortales en 60.000, número que entonces calificó de “impresionante”. Pillay dijo este martes (12.02.2013) que la profunda división e inacción de la comunidad internacional en torno al conflicto en Siria “ha sido desastrosa y los civiles de todos los bandos han pagado el precio”.

DZ (Reuters, dpa, AP)