El ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, rechazó mencionar un calendario concreto para la salida del Ejército alemán de Afganistán, durante una visita sorpresa a Afganistán. En Kabul, Westerwelle se reunirá con el presidente afgano, Hamid Karzai, y el nuevo comandante de las tropas internacionales de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), John Allen, que asumió el mando el pasado lunes de manos de David Petraeus, futuro jefe de la CIA. "No sería inteligente decir dónde y en qué mes reduciremos qué tropas", pues ello sería una "invitación" a la insurgencia a "activarse especialmente en esos lugares con actos violentos", señaló. El Gobierno alemán quiere comenzar la retirada de sus más de 5.000 efectivos de Afganistán. Está previsto que a finales de 2014 estén todos de regreso al país europeo. La oposición alemana, sin embargo, exige pasos de retirada concretos para los próximos años. Westerwelle viajó a Afganistán en el marco del traspaso de las competencias de seguridad a las fuerzas afganas en siete ciudades y distritos del país, entre ellas en Masar-i-Sharif, competencia hasta ahora del Ejército alemán. "Esta semana comienza una nueva etapa en nuestra política afgana", señaló. DPA