Gran Bretaña, pan y el bloqueo de Berlín 70 años después
Tom Allinson
12 de mayo de 2019
En los años de posguerra, Gran Bretaña jugó un gran papel en romper el bloqueo de Berlín. En ese entonces, las mentes y corazones para favorecer la democracia se ganaban a través del estómago.
Publicidad
Cuando el príncipe Carlos de Inglaterra se reunió con la canciller alemana, Angela Merkel, la semana pasada, el heredero del trono británico recalcó el compromiso mutuo y la amistad que "quiere y debe durar", dado que sus países "han pasado por mucho juntos". Aunque la relación de posguerra fue débil inicialmente, ese compromiso se demostró por primera vez cuando Gran Bretaña ayudó a romper el bloqueo soviético de Berlín, establecido para matar de hambre a los Aliados hace 70 años.
Para Bernd von Kostka, del berlinés Museo de los Aliados, que Gran Bretaña pasara de ser el enemigo a ser el salvador a través del espectacular puente aéreo de Berlín no sería posible hoy en día. "Llevar comida y bienes a la capital del antiguo enemigo que acababa de bombardear Londres y Coventry y hacerlo mientras el país mismo tenía que implementar el racionamiento para su propia gente es una situación inédita", afirma Von Kostka. "Para ser sincero, esto es algo que ningún país en el mundo repetiría hoy".
El hambre: la lógica de la guerra y la paz
Como enemigos, británicos y alemanes habían conocido el hambre y los racionamientos durante la Segunda Guerra Mundial, pero los primeros pasos hacia una nueva relación también comenzaron a través de la comida. Como ocupantes de la zona noroccidental de Alemania tras la guerra, Gran Bretaña tenía la responsabilidad de alimentar a una población en riesgo de morir de inanición.
Cuando el gobierno laborista introdujo el racionamiento del pan en julio de 1946, algo que Gran Bretaña no había vivido siquiera durante la guerra, justificó la decisión como un sacrificio. Para prevenir la hambruna en Alemania, donde "la gente de los antiguos países enemigos corría peligro de morir de hambre", como escribió Susan Cooper en el libro Age of Austerity (La edad de la austeridad), el pan sería racionado, así como el tocino, las carnes, el arroz, los huevos y la mantequilla.
La idea era reducir las importaciones de grano en un momento en que un duro invierno amenazaba la producción mundial y que los cereales estadounidenses pudieran desviarse para alimentar la zona ocupada por los británicos. No era una medida popular y posiblemente ni siquiera era necesaria, porque las raciones establecidas no eran mucho más pequeñas de lo que la gente se había acostumbrado a comer; pero los británicos entendían el lenguaje del hambre en medio de una escasez sin precedentes.
"Ganar la paz"
Estratégicamente hablando, el racionamiento del pan fue uno de los primeros indicios de cómo Gran Bretaña podría tratar de "ganar la paz", mientras entre los aliados occidentales y los soviéticos empezaba a levantarse el telón de acero de la Guerra Fría. Eso también supuso convencer a ambos pueblos de que, a pesar de antiguas diferencias, ahora eran amigos frente a un nuevo enemigo.
"La democracia en Alemania estaba en sus comienzos", explica Von Kostka a DW. "Fue un paso esencial decir: si queremos establecer una democracia, debemos asegurarnos de que la democracia sea capaz de dar de comer a la gente". El proyecto, por supuesto, tenía sus detractores.
Un programa británico de la productora Pathé que trataba, en 1946, de encontrar "la verdad sobre si Alemania se estaba muriendo de hambre", mostraba hombres y mujeres desnutridos en un "pabellón del hambre" de Langehorn, en Hamburgo, mientras que una escena mostraba a un panadero británico preguntándose "¿y nosotros qué?".
En el mismo material, el comandante en jefe de la zona británica, Sir Sholto Douglas, dejaba en claro que apoyar a Alemania había sido la decisión correcta: "Lo que está pasando en Alemania nos concierne, y mucho", decía.
El bloqueo de Berlín
Pero solo dos años después, la Unión Soviética intentó utilizar el hambre para tomar el control total del este de Alemania. El racionamiento del pan británico terminó en julio de 1948. Pero justo antes, la desconfianza mutua entre los aliados occidentales y la Unión Soviética sobre la introducción de una nueva moneda en el oeste para estabilizar la economía, llevó al bloqueo soviético de Berlín.
Los soviéticos cortaron todo acceso terrestre, ferroviario y acuático a los sectores controlados por los británicos, franceses y estadounidenses. El plan del bloque del este era similar al "bloqueo del hambre" que Alemania estableció contra los británicos durante la Primera Guerra Mundial: matar de hambre a la población de esos sectores para socavar el apoyo a los Aliados y acabar echándolos de la ciudad dividida.
Pero, al ver a Berlín como un baluarte contra la expansión soviética, los Aliados se mantuvieron firmes y el 24 de junio acordaron el ambicioso plan de rescate del comodoro de la Fuerza Aérea británica, Reginald Waite. "Era literalmente impensable en 1948 abastecer a la parte occidental de una ciudad con más de dos millones de habitantes exclusivamente por aire y el comodoro Waite fue el primero al que se le ocurrió que podría ser posible", explica Von Kostka.
Un puente en el cielo
Conocido en alemán como "Luftbrücke" (literalmente "puente aéreo"), Gran Bretaña y Estados Unidos establecieron vuelos de suministro durante todo el día en un flujo continuo, estableciendo un puente virtual en el cielo.
Los franceses, que habían sufrido las consecuencias directas de la ocupación alemana, pronto se unieron al enorme puente aéreo. Más de 25 aviones civiles británicos se unieron a la procesión de vuelos que despegaban y aterrizaban a intervalos de 90 segundos en los aeropuertos de los tres sectores aliados, suministrando al menos 5.000 toneladas de alimentos y combustible al día. Los berlineses resistieron durante 318 días, hasta que los soviéticos se dieron cuenta de cómo estaban cayendo ante los ojos del público y terminaron el bloqueo el 12 de mayo de 1949.
Estados Unidos llevaba a cabo la mayoría de los vuelos. Los británicos, una cuarta parte. Para Von Kostka, el hecho de que la guerra hubiera sido solo tres años antes, hace aún más notable el papel británico. También destaca el coraje político que supuso, el cual puede no resultar tan evidente hoy.
"¿Quién puede pensar que va a ser reelegido diciéndole a los votantes: 'Sé que hemos sufrido racionamiento durante años y que nos quedan otros cinco, pero todavía tenemos que proveer al país que nos estuvo bombardeando hace tres años'?", destaca Von Kostka.
(lgc/rrr)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |
El "puente aéreo" de Berlín
Después de la II Guerra Mundial, Berlín quedó cercada por los soviéticos, y los aliados abastecieron a los berlineses de alimentos y carbón para que pudieran sobrevivir con un operativo espectacular, el "puente aéreo".
Sobre la fachada del Museo de la Técnica, en Kreuzberg, Berlín, este avión C-47 parece listo para volar otra vez. Es un símbolo inolvidable de uno de los capítulos más amargos de la historia berlinesa: durante 14 meses, el oeste de la capital alemana fue abastecido por los aliados occidentales desde el aire, luego de que los soviéticos cerraran todos los caminos que conducían a la ciudad.
Después de la II Guerra Mundial, las cuatro potencias occidentales dividieron Alemania, y también a Berlín, en cuatro zonas de ocupación. Era una pulseada por controlar la excapital del Tercer Reich. El 24 de junio de 1948, los soviéticos bloquearon todos los caminos por tierra y por agua hacia Alemania Occidental, también el abastecimiento eléctrico. Los aliados reaccionaron de inmediato.
Imagen: picture-alliance/United Archives/WHA
Aeropuerto de Tempelhof: la puerta hacia el mundo
El 25 de junio de 1948, el gobernador militar de EE. UU., Lucius D. Clay, dio la orden de abastecer de inmediato a Berlín desde el Oeste. Al día siguiente, el primer avión de carga aterrizaba en el aeorpuerto deTempelhof, que se convirtió en el punto de contacto más importante durante el bloqueo de Berlín. Hoy es un museo donde se puede revivir ese momento crucial de la historia alemana.
Imagen: picture-alliance/dpa/G. Fischer
Despegues y aterrizajes minuto a minuto
Cerca de 2,2 millones de berlineses recibieron alimentos y productos básicos desde el aire. Los aliados crearon un sistema eficiente: tres corredores aéreos funcionaban como calles de una vía, dos para la ida y una para la vuelta. Hasta cinco aviones podían volar uno sobre el otro. El resultado fue impresionante: 278.000 aterrizajes y 2,3 millones de toneladas de carga en un lapso de 14 meses.
Imagen: picture-alliance/Everett Collection
Aeropuerto de la Fuerza Aérea en Gatow
El segundo aeropuerto más importante en el bloqueo de Berlín fue Gatow, en el sector británico de Alemania. Los británicos llevaron a cabo allí un 42 por ciento de los aterrizajes, proveyendo de combustible y alimentos a los berlineses del oeste y transportando a adultos y niños enfermos para que recibieran tratamiento. Hoy, los hangares albergan una exposición de la aviación militar alemana.
Imagen: Militärhistorisches Museum Flugplatz Gatow
Aeropuerto de Tegel, parte del "puente aéreo"
La mayoría de los berlineses y de los turistas pasan por el aeropuerto de Tegel sin saber que también formó parte del "puente aéreo". Fue reformado en los años 70, pero se comenzó a construir en 1948.
Imagen: picture-alliance/dpa/S. Kembowski
Rápida reacción de los franceses
El aeropuerto de Tegel fue la contribucion de los franceses al "puente aéreo" de Berlín. A fines de 1948, los aliados franceses contruyeron en solo tres meses, la pista más larga de Europa en ese momento, de 2,5 km de largo. 19.000 berlineses trabajaron para colaborar con su construcción, la mitad de ellos, mujeres. El 5 de noviembre se inauguró el tercer aeropuerto del puente aéreo de Berlín.
Imagen: picture-alliance/dpa/UPI
El "bombardero de las golosinas"
El piloto norteamericano Gail Halvorsen, conocido como "Candy-bomber" o "bombardero de las golosinas", se hizo famoso porque lanzaba caramelos, chocolates y pasas de uva en pequeños paracaídas hechos por el mismo para alegría de los niños berlineses.
Imagen: picture-alliance/dpa
Museo de los Aliados, en Dahlem
La historia del "puente aéreo" de Berlín, así como de otros aspectos de la vida en Berlín en tiempos de la Guerra Fría, pueden revivirse hoy en el Museo de los Aliados, en el barrio berlinés de Dahlem, que pertenecía al sector estadounidense. La exposición también muestra cómo los aliados se ganaron de a poco la confianza de los berlineses gracias al puente aéreo.
Imagen: AlliiertenMuseum/Choda
Regalos del cielo
Conservas, frutos secos, leche en polvo, café: eso es lo que contenían los paquetes "Care" que traían los aliados a Berlín. Para muchos, fueron la salvación. La organización privada Care, de EE. UU., envió sus propios aviones, que abastecían a los berlineses con hasta 1.000 paquetes por día. El contenido del paquete, de un valor de 15 dólares, alimentaba a una familia durante un mes.
Imagen: AlliiertenMuseum/Choda
También llegaban árboles
Hasta los primeros árboles para la reforestación del gran parque berlinés Tiergarten fueron transportados gracias al "puente aéreo". Luego del invierno de 1948, el parque en el centro de la ciudad estaba prácticamente deforestado, ya que los berlineses usaron la madera para cocinar y no morir de frío. El 17 de marzo de 1949 se comenzó a plantar nuevos árboles.
Imagen: picture-alliance/dpa/H. Link
"Pueblos del mundo, mirad esta ciudad"
El entonces alcalde de Berlín, Ernst Reuter, había calculado que, si la ciudad era sitiada por los soviéticos, las reservas de alimentos y carbón no alcanzarían para seis semanas. Pidió al mundo ayuda, y a los berlineses, no rendirse. El 12 de mayo de 1949, los soviéticos terminaron con el bloqueo de Berlín Occidental, luego de 322 días.
Imagen: picture-alliance/akg-images
Monumento al "puente aéreo". La "Garra del Hambre"
78 pilotos fallecieron al intentar aterrizar sus aviones en Berlín. Este monumento los homenajea desde 1951 en la Plaza del Puente Aéreo de Berlín. Las tres columnas representan los corredores aéreos. Los berlineses lo llaman "Garra del Hambre". Hay copias de esta escultura en Fráncfort del Meno y Celle, es decir, en las ciudades alemanas del oeste desde donde partían los aviones hacia Berlín.
Imagen: picture-alliance/Arco Images/Schoening
La Campana de la Libertad en la alcaldía de Schöneberg
Esta campana fue un obsequio de EE. UU. a Berlín Occidental, un símbolo de la democracia y la libertad, contra el comunismo. El 24 de octubre de 1950 fue inaugurada por el "Padre del puente aéreo", el general Lucius D. Clay. Hasta hoy sigue tañendo todos los días a las 12:00 del mediodía para recordar el fin del bloqueo de Berlin.