1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

La política europea de emisiones y los productos del sur

2 de mayo de 2024

¿Para bajar emisiones, dificultará Europa la entrada a productos frescos del sur global porque llegan en avión? ¿Y las flores de Kenia o Ecuador?

Productos del sur global en un mercado mayorista en Hamburgo
Productos del sur global en un mercado mayorista en HamburgoImagen: picture-alliance/dpa

¿Que la Unión Europea dejara de importar por vía aérea frutas y verduras de terceros países sería clave en la reducción de emisiones para alcanzar la neutralidad hasta el 2050? A esta pregunta hecha en una conferencia internacional en Bruselas, un cinco por ciento de los casi 200 encuestados respondieron afirmativamente.  ¿Qué significaría para países como República Dominicana o Ecuador, grandes exportadores de productos frescos, una regulación más estricta para la entrada de sus frutas, hortalizas y flores por vía aérea? 

"Es difícil de decir. Hay que analizarlo producto por producto y por cada cadena de valor”, explica a DW Jeremy Knops, delegado general de COLEAD (Comité de Enlace entre Espíritu Empresarial, Agricultura y Desarrollo), el consorcio internacional que auspició la conferencia.

En ella, especialistas de diversos campos plantearon la difícil ecuación de velar por el medio ambiente, el consumidor europeo, los países exportadores y las poblaciones productoras en el sur global.

Disminuir emisiones, alcanzar el desarrollo sostenible

En el fuego cruzado entre los objetivos de descarbonización y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) -entre ellos, acabar con la pobreza, reducción de desigualdades y trabajo decente para todos-, ni los productores de mercancías frescas en el sur global ni los que comercian con ellas deberían salir perdiendo, fue una de las conclusiones del encuentro.

El tema tiene muchas aristas: si bien el transporte aéreo de estos productos es responsable solamente del 1,25% de las emisiones, su producción a veces tiene un altísimo impacto medio ambiental. "Por esa razón, este consorcio aboga por no tomar decisiones basándose solamente en el sector del transporte; hay que tener en cuenta el impacto de la producción o el manejo de los suelos”, sigue Knops.

En caso de que hubiera que establecer prioridades, ¿serían las frutas y las verduras más importantes que la importación de flores frescas? "No polarizamos los segmentos del mercado”, responde el delegado de COLEAD. "Uno de nuestros mensajes es que debemos incentivar el consumo de fruta y verdura, venga de donde venga. Por otro lado, en el sector de las flores en Kenia hay muchas empresas -importantes vectores de tecnología- que también producen frutas y hortalizas. Desde el punto de vista de los ODS tienen un lugar importante en el ecosistema. Nunca hay una respuesta simple a fenómenos tan complejos”, subraya Knops.

"Antes de apuntar con el dedo a los productos que se importan por vía aérea, habría que analizar y medir cuánto costaría e impactaría el medio ambiente producir en invernaderos con calefacción en Europa tomates todo el año”, explica a DW Miguel Escudero, de la organización Rikolto.

Esta organización internacional opera en las Américas, África y Asia en la adaptación de la agricultura para un cambio en el sistema alimentario. Desde el proyecto CREA (Camino a la Reactivación del Ecuador Agroalimentario), Escudero trabaja en la investigación de reducción del uso de agua en la producción de aguacate y del impacto de la huella de carbono en las plantaciones de café. Se trata también de adaptar ocho productos (quinoa, aguacate, guanábana, cacao, café, plátano, banano y la hierba guayas) para su mejor exportación al mercado europeo.

Agricultores y pobres

Ambos especialistas coinciden: una prohibición de entrada al mercado europeo afectaría a los países productores y no reduciría grandemente las emisiones. En mejores combustibles y en inversión en tecnología de transporte avizoran soluciones más sostenibles. ¿Y el objetivo de trabajo decente y de reducción de la pobreza? Curiosamente, en varios de los países del sur global que encabezan la lista de exportaciones y comercio con fruta y verdura, los niveles de pobreza y desigualdad dejan mucho que desear.

"En la cadena de valor hay que incluir aún un número de condiciones para que sean justas, inclusivas y sustentables. El comercio de la horticultura no va a solucionarlo todo, pero afirmamos que debe seguir siendo un contribuyente importante a la consecución de los ODS. Y que hay que darles tiempo y hay que invertir en complejos cambios. No se les puede negar la entrada a estos mercados basados solamente en el criterio del impacto del transporte aéreo”,  concluye Knops. 

(ers)

Ir a la siguiente sección Descubra más