La reforma fiscal del gobierno del presidente francés, François Hollande, sufrió hoy un inesperado revés en el Parlamento, después de que el Senado rechazara aumentar el impuesto de sucesiones. La cámara alta del Parlamento votó a favor de una enmienda promovida por la oposición por un margen de cinco votos (170-165), pese a la mayoría del Partido Socialista de Hollande. Los socialistas explicaron lo sucedido por "problemas técnicos", señaló la emisora parlamentaria Public Sénat, y hablaron de retrasos en la votación definitiva. Los socialistas quieren reducir las exenciones a los impuestos sobre las herencias de 159.000 euros (192.000 dólares) a 100.000 euros como parte de un paquete que contempla subidas de impuestos por 7.200 millones de euros que forma parte de la enmienda presupuestaria de 2012. Pero la Unión por un Movimiento Popular del ex-presidente Nicolas Sarkozy se opuso a la medida alegando que el aumento afectará a las familias de clase media, y no sólo a las ricas, como afirman los socialistas. "100.000 euros cuesta un apartamento de 12 metros cuadrados en París", argumentó el senador de UMP Philippe Marini. La Asamblea Nacional, la cámara baja del Parlamento, aprobó la enmienda presupuestaria la semana pasada tras días de fuerte debate. Ahora esta siendo debatida en el Senado. DPA