Armenia se preparaba este lunes (25.09.2023) para recibir a más armenios que huyen de la vecina región separatista de Nagorno Karabaj, en Azerbaiyán.

El gobierno armenio dijo el domingo (24.09.2023) que habían llegado más de 1.000 refugiados tras la operación militar de Azerbaiyán para tomar el control de la región en disputa, poblada principalmente por personas de etnia armenia.

Los medios de comunicación de Rusia, antiguo aliado de Armenia, informaron el lunes temprano que cerca de 3.000 personas abandonaron Nagorno Karabaj en dirección hacia Armenia a las 5 a.m. hora local (01:00 GMT).

Después de décadas de conflicto, los armenios locales temen la expulsión o la venganza del autoritario Azerbaiyán.

"Las familias que se han quedado sin hogar, tras la reciente operación militar, y quieren abandonar la república, serán llevadas a Armenia", anunciaron el domingo (24.09.2023) las principales autoridades armenias en Stepanakert, la capital de Nagorno Karabaj.

Murieron más de 200 personas

El martes pasado, Azerbaiyán lanzó una operación militar para apoderarse de Nagorno Karabaj. Tras un día, los combatientes armenios de la región se rindieron.

Según fuentes armenias, más de 200 personas murieron durante los breves combates y más de 400 resultaron heridas. Azerbaiyán prometió permitir que los heridos abandonaran la región y se dirigieran a Armenia.

¿Cuál es la situación sobre el terreno?

Tan pronto los habitantes de la capital de Nagorno Karabaj, Stepanakert, también conocida como Khankedi en Azerbaiyán, escucharon los primeros disparos la semana pasada, corrieron a sus sótanos en busca de refugio.

La ciudad se sumió en el caos, hubo pánico y muchas personas fueron desplazadas y separadas de sus familias. "Esos dos días fueron insoportables. Oímos explosiones justo al lado de nuestra casa. Los drones sobrevolaban nuestros tejados. Nuestra casa temblaba", recuerda Nina, una residente local.

En un mensaje de voz a la periodista de DW Maria Katamadze, elle explicó que la situación en la ciudad es "catastrófica".

"Casi no tenemos electricidad ni conexión con el mundo exterior. Ni siquiera sabemos qué está pasando con nuestros familiares y amigos", dijo.

Entretanto, los primeros refugiados comenzaron a llegar a Armenia el domingo por la mañana en sus automóviles y en  autobuses, escoltados por fuerzas de paz rusas. A su llegada fueron recibidos por la Cruz Roja y recibieron los primeros auxilios médicos y psicológicos.

Ya más tarde, por la noche, los refugiados empezaron a llegar en autobuses a un hotel de la cercana ciudad de Goris.

"Lloraba todo el tiempo. Pensábamos que nos matarían. Los misiles pasaban sobre nuestras cabezas. Estamos aquí y ese es el milagro", dijo a DW Sakuri, madre de tres hijos.

"Había mucho ruido. Misiles, helicópteros y drones. Ya no siento nada. Es tan malo. No, es terrible", dijo Angelina, una estudiante.

Armenia a ONU: vigilar los derechos humanos

Armenia pidió el sábado el despliegue de una misión de la ONU en Nagorno Karabaj para monitorear los derechos humanos y garantizar la seguridad de las personas de etnia armenia en la región.

"La comunidad internacional debe emprender todos los esfuerzos para el despliegue inmediato de una misión interinstitucional de la ONU en Nagorno Karabaj con el objetivo de monitorear y evaluar la situación de derechos humanos, humanitaria y de seguridad en el terreno", dijo el ministro armenio de Asuntos Exteriores, Ararat Mirzoyan, en un discurso ante los delegados de la ONU en Nueva York.

El gobierno de Azerbaiyán dijo comprometerse a proteger los derechos de las personas de etnia armenia en el territorio.

El lunes hubo protestas en la capital armenia, Ereván, en las que los manifestantes afirmaron que el gobierno no ha protegido a los armenios en Nagorno Karabaj.

"Nos sentimos fatal. El gobierno no piensa en nuestros conciudadanos, que se están muriendo de hambre o por disparos", dijo Anait, una de las manifestantes en Ereván, la capital de Armenia.

(rmr/ers)