Desde hace días las encuestas señalaban lo que hoy los electores del estado más poblado de Alemania, Renania del Norte-Westfalia, decidieron en las urnas: los alemanes quieren el cambio. El Partido Social Demócrata Alemán pierde su último bastión en el país. La oposición conservadora, la Unión Cristiano Demócrata, obtuvo el claro apoyo del electorado.

A pesar de que los políticos de la coalición gobernante no se cansaron de repetir que los resultados de esta elección regional no tendrían ninguna repercusión a nivel nacional, las elecciones de Renania del Norte Westfalia se han convertido en una verdadera sensación.

El SPD no sólo registró el peor resultado de los últimos 50 años en este estado; se trata del onceavo fracaso a nivel regional. En las últimas 11 elecciones regionales el Partido Social Demócrata ha perdido, estado por estado, su dominio en Alemania.

De ahí que el anuncio realizado por el presidente del SPD, Franz Münterfering, poco después de que se dieran a conocer los primeros resultados a pie de urna, en el sentido de que conjuntamente con el canciller alemán Gerhard Schröder propondrá la convocatoria de elecciones legislativas anticipadas para este otoño, no resulte ilógico. Aún así fue una sensación que cimbró al país entero pues nadie lo esperaba.

"Hora de aclarar las cosas en Alemania"

Müntefering explicó que el martes la cúpula del partido se reunirá para analizar la propuesta y señaló que espera que le apoyen para luchar porque Gerhard Schröder siga siendo el canciller. "Buscamos la decisión. Es hora de aclarar las cosas en Alemania", dijo Müntefering al anunciar la sorprendente decisión.

En caso de que la presidencia del partido respalde esta propuesta, la deberá llevar al Bundestag, que es el único órgano institucional que puede decidir sobre la convocatoria anticipada de las elecciones. En un principio estaba previsto que las elecciones se celebraran en otoño del año próximo.

Müntefering explicó que la decisión se tomó para lograr un desbloqueo político en el Bundesrat, la cámara alta de representación regional, y obtener un nuevo margen de maniobra. Con ello alude el bloqueo que hay en el Bundesrat a muchos proyectos del gobierno roji-verde ante el rechazo de la oposición, que tiene la mayoría en esta cámara.