El enviado especial de la ONU para Siria, Lakhdar Brahimi, se reunió hoy con el presidente sirio Bashar Al Assad, para intentar que las partes enfrentadas apliquen un alto el fuego durante la festividad musulmana del sacrificio que comienza el 26 de octubre, informó hoy la televisión estatal siria.

Brahimi pidió a las partes en conflicto que declaren "unilateralmente" el alto el fuego. El argelino pidió a la oposición y al gobierno que cesen las hostilidades para la fiesta del sacrificio, una de las más importantes festividades del calendario musulmán, que arranca el próximo viernes.

Si todo el mundo lo respeta, sería como si al final se hubiese llegado a un acuerdo común, dijo Brahimi.

Los líderes de la oposición que también se reunieron con Brahimi saludaron la propuesta. "La situación en Siria ha llegado a un nivel peligroso de violencia que suponen una amenaza a la independencia y la soberanía del país", dijo Hassan Abdul Azim, líder del opositor Cuerpo de Coordinación Nacional, según le citan medios árabes.

Brahimi reconoció que hay muy pocas posibilidades de que estos esfuerzos por lograr la paz tengan éxito. Los combates entre los rebeldes que buscan apartar a Al Assad del poder y las fuerzas del gobierno matan a diario a decenas de personas.

El Observatorio de Derechos Humanos sirio, con sede en Londres, informó que un coche bomba estalló en el barrio de Seryan, en Alepo. Y se han reportado víctimas.

También se han reportado intensos combates en Ghotta, al este de Damasco.

La fiesta del sacrificio, Eid Al Adha, comienza en Siria el próximo viernes y dura cuatro días. Se trata de la principal festividad del calendario islámico y en ella los musulmanes recuerdan la disposición de Abraham (en árabe Ibrahim) de sacrificar a su hijo para mostrar su fe en Dios, con el rito del sacrificio de un cordero.

Fuente: DPA

Editor: Enrique López