El multimillonario británico preparó la partida junto a su amigo Elon Musk, mientras su gran rival en la carrera por ser el primer empresario en viajar al espacio en un cohete fabricado por él, Jeff Bezos, lo criticaba.
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Siempre soñó con esto, y para hacerlo realidad fundó su propia empresa hace 17 años: el multimillonario Richard Branson voló al espacio este domingo (11.07.2021) desde Nuevo México, en Estados Unidos, para pasar unos minutos en ingravidez a bordo de una nave de Virgin Galactic. Al iniciar el regreso, en una breve conexión, un visiblemente emocionado Branson dio las gracias a todo su equipo por haberlo hecho posible. Mientras volaba, calificó la experiencia como "única en la vida".
Este británico busca propulsar la incipiente industria del turismo espacial. Pero también superar a su competidor, el estadounidense Jeff Bezos, fundador de Amazon, arrebatándole el título de primer multimillonario en cruzar la frontera espacial gracias a la nave de una empresa que él mismo fundó. Ayer, Bezos dijo que el vuelo de hoy de Branson no tiene altura suficiente para poder ser considerado "espacial" (100 km de altura, frente a los 80 km que alcanza Virgin Galactic).
"Un gran día por delante. Es genial empezar la mañana con un amigo", tuiteó Branson dos horas antes del despegue, junto a una foto de él y el jefe de SpaceX, Elon Musk, posando descalzo en una cocina. Musk, gran rival de Bezos, había indicado el sábado que estaría presente en el evento. Branson añadió otro tuit luego para seguir en directo el vuelo.
"Me siento bien, emocionado y preparado", añadió Branson, que tendrá una misión muy precisa durante su viaje: probar y evaluar la experiencia que vivirán sus futuros clientes. Otros multimillonarios ya han estado en el espacio en la década de 2000, pero a bordo de cohetes rusos.
En esta ocasión, el viaje no se iniciará con un cohete, sino con un enorme avión que transportará la nave espacial. Una vez que haya despegado de una pista tradicional, el avión conducido por dos pilotos tomará altura durante aproximadamente una hora. Adosada a la parte inferior del avión se encontrará la nave espacial VSS Unity -una copia del modelo SpaceShipTwo- con otros dos pilotos y cuatro pasajeros a bordo: Richard Branson y tres empleados de su empresa.
A una altura de unos 15 kilómetros, la nave -del tamaño de un jet privado- se soltó y encendió su motor para un ascenso supersónico hasta una altura de más de 80 kilómetros, el límite establecido en Estados Unidos para la frontera espacial. Una vez apagado el motor, los pasajeros podrán desprenderse de sus asientos y flotar durante unos minutos en ingravidez, admirando la curvatura de la Tierra desde una de las 12 ventanas de la cabina. Tras alcanzar un pico de altitud de unos 90 km, la nave descenderá planeando.
lgc (afp/efe) Actualizado a las 17:30 con el descenso.
El álbum de fotos de un astronauta alemán
Después de casi seis meses en el espacio, el astronauta Alexander Gerst regresó a la Tierra con los resultados de sus investigaciones y fotos impactantes que ahora compartimos con ustedes.
“¡Hola Berlín, desde aquí no se divisan fronteras!”, tuiteó Alexander Gerst este 9 de noviembre, al cumplirse 25 años de la caída del Muro. En 166 días, el astronauta llevó a cabo diversos experimentos científicos, pero los resultados más impactantes de su viaje por el espacio son las fotos que sacó, y que aquí compartimos con ustedes.
Imagen: Alexander Gerst/ESA/picture-alliance/dpa
Aurora polar
“No se puede explicar en palabras lo que se siente al volar a través de luces polares”, dijo Alexander Gerst, que observó ese fenómeno desde la sonda Soyuz TMA-13M. La meta del astronauta era estudiar la influencia de la radiación electromagnética en los aparatos electrónicos.
El Sahara se describe a menudo como un desierto infinito. Las tomas de Alexander Gerst sobre Libia muestran que también las extensas dunas tienen principio y fin.
Imagen: ESA/NASA
Tiempo de despertarse
La mayoría de la gente dormía aún en Florida, EE. UU., cuando Alexander Gerst y sus colegas tomaron esta instantánea, poco antes de la salida del sol.
Imagen: picture-alliance/dpa/NASA
El cráter de un meteorito
No es ni una montaña ni un volcán. En la foto se ve el cráter que dejó un meteorito al caer en Arizona. Mide 1.186 metros de diámetro y tiene 180 metros de profundidad.
Parece un pequeño agujeron en una capa de nubes, pero tiene 80 kilómetros de diámetro. Aunque su apariencia es fascinantes, tifones como éste provocan grandes daños en la superficie terrestre.
Las imágenes que tomó Alexander Gerst muestran momentos únicos. Esta foto da testimonio de la escalada de violencia en el conflicto entre Israel y Gaza. Allí se ven misiles y explosiones.
Imagen: picture-alliance/dpa/ESA/NASA
Atmósfera incandescente
Este es un fenómeno muy especial: también sobre la Tierra se pueden ver auroras boreales. Alexander Gerst tuvo la oportunidad y la suerte de observarlas desde el espacio infinito.
Imagen: ESA/NASA
Fotos y análisis
Los astronautas ponen sus fotos a disposición para fines científicos. Las imágenes de los valles cruzados por ventiscas en África del Norte se utilizan para realizar estudios comparados. De ese modo se pueden detectar modificaciones en el paisaje y analizar el rol del ser humano en los cambios en el planeta.
El agua escasea en muchas regiones del mundo. Los círculos en la foto no son la obra de una nave extraterrestre, sino las centrales hídricas en las regiones más secas de México. Algunos experimentos de Alexander Gerst también se ocupan del problema alimentario. Los astronautas plantaron lechuga en la cápsula espacial y estudiaron cómo reducir el consumo de agua del cultivo.
Imagen: ESA/NASA
Como una pintura al óleo
Algunas de las fotografías de Gerst parecen la obra maestra de pintores famosos. Esta imagen, por ejemplo, muestra los meandros de un río en Kazajistán.