Rusia promete responder a prueba de misil de EE.UU.
23 de agosto de 2019
El mandatario ruso, Vladimir Putin indicó que su país está analizando la amenaza que encierran el lanzamiento de un misil de mediano alcance de parte de la administración Trump.
Publicidad
Después que Estados Unidos realizara el lanzamiento de un misil en la isla de San Nicolás, el domingo pasado (18.08.2019), el presidente ruso, Vladimir Putin, prometió públicamente que su país tendrá una "respuesta simétrica" an dicho lanzamiento, el primero que hace Estados Unidos desde la Guerra Fría y que fue fuertemente cuestionado por el Kremlin y por China.
"Ordeno a los ministerios rusos de Defensa y de Exteriores (...) que se analice el nivel de amenaza para nuestro país por los actos de Estados Unidos, y que se tomen medidas exhaustivas para preparar una respuesta simétrica", declaró Putin, en una reunión de su Consejo de seguridad.
Este ensayo estadounidense, efectuado frente a las costas de California (suroeste), confirmó el entierro del tratado de desarme INF que prohibía el uso por parte de Rusia y Estados Unidos de misiles terrestres de un alcance de 500 a 5.500 kilómetros. Este tratado fue oficialmente suspendido hace menos de un mes por las dos potencias rivales, que se acusan mutuamente de violarlo.
"Es evidente que (la prueba del misil estadounidense) no era resultado de una improvisación, sino un eslabón más en una cadena de acontecimientos planificados desde hace tiempo. Esto solo confirma la veracidad de nuestras preocupaciones expresadas previamente", concluyó Putin.
Estados Unidos abandona el INF
02:20
Acusaciones mutuas
Entre los argumentos y antecedentes que tiene uno y otro país para acusarse de violar los acuerdos armamentistas está por un la do Estados Unidos que considera que el misil ruso 9M729 tiene un alcance de 1.500 km, lo que Moscú desmiente. Por otra parte, Rusia denuncia que el sistema de defensa antimisiles estadounidense Aegis Ashore, desplegado en Polonia y Rumanía podría ser utilizado con carácter ofensivo, para mandar misiles, contra su territorio.
Putin considera que "la verdadera intención" de Estados Unidos es "desplegar en diferentes regiones del mundo de los misiles prohibidos previamente". Pero su despliegue, en Europa y en Asia, "afecta a nuestros intereses básicos, puesto que es cerca de las fronteras rusas" advirtió el mandatario ruso. "No hemos querido nunca, no queremos y no vamos a dejarnos arrastrar a una carrera de armamentos, muy costosa y destructora para nuestra economía" añadió.
Con el entierro del tratado INF solo queda en vigor un acuerdo nuclear bilateral entre Moscú y Washington: el tratado START, que mantiene los arsenales nucleares de ambos países muy por debajo de los niveles de la Guerra Fría. Este tratado vence en 2021.
mn (efe, afp)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |
¿Guerra Fría recargada?
Con la suspensión del tratado nuclear INF, una de las principales iniciativas de desarme de los años 80 ha sido archivada. Este acuerdo fue un mérito de la diplomacia y del movimiento por la paz. Aquí una revisión.
Imagen: picture-alliance/dpa/P. Zinken
Rearme verbal y material
EE. UU. suspendió primero su participación en el tratado nuclear INF durante seis meses, y un día después, lo hicieron los rusos. Por el momento, estas decisiones ponen fin a una fase de tres décadas de entendimiento y desarme entre las principales potencias. Los militares y los políticos participaron en este pacto, igual que la sociedad civil, que se movilizó masivamente en los años ochenta.
Imagen: picture-alliance/dpa/P. Zinken
Arsenal del terror
El INF fue uno de varios tratados diseñados para frenar el terrorífico arsenal atómico creado por el rearme de la Guerra Fría. Aquí hay un misil Pershing II de EE.UU. equipado con una cabeza nuclear en la base estadounidense Mutlangen, en Baden-Württemberg (Alemania).
Imagen: picture-alliance/dpa/R. Schrader
Brindis por el entendimiento
El avance hacia el tratado INF fue logrado por el entonces presidente de EE. UU. Ronald Reagan (izquierda) y el líder soviético Mijail Gorbachov (derecha) en diciembre de 1987. Tras su firma en Washington, ambos políticos presionaron para un nuevo comienzo en las relaciones Este-Oeste.
Imagen: picture-alliance/dpa
Línea directa
Una de las grandes preocupaciones durante la Guerra Fría fue que las dos grandes potencias podrían declararse la guerra entre sí por un simple error de comunicación. Es por eso que los ingenieros de ambos países establecieron la llamada "línea directa" en 1963: una conexión directa entre Washington y Moscú. Esta imagen muestra un télex en el Pentágono en 1963.
Imagen: picture-alliance/ dpa
Entre dos frentes
Durante la Guerra Fría, el Telón de Acero corrió por el centro de Alemania. La República Federal de Alemania (RFA) estaba vinculada a Occidente, y la República Democrática Alemana (RDA) a la esfera de influencia oriental. En el caso de una guerra nuclear, el Gobierno federal tenía su propio búnker cerca de Ahrweiler, en su sede ubicada en Bonn.
Imagen: DW/Maksim Nelioubin
Gobierno subterráneo
En caso de una guerra nuclear, el Gobierno de Alemania Occidental debía continuar trabajando. Por lo tanto, el búnker estaba equipado con todo lo necesario. En el subsuelo también había una sala de reuniones con colores cálidos que supuestamente aliviaban el horror del búnker.
Imagen: DW/Maksim Nelioubin
¿Guerra nuclear? No, gracias
El temor a una posible guerra nuclear también impulsó a gran parte de la población a manifestarse. A fines de la década de 1970 surgió un movimiento por la paz que durante años exigió desarme y entendimiento. Aquí hay un pin correspondiente a una de las reuniones celebradas en Bonn, en octubre de 1981.
Imagen: HDG
Demostración histórica en el Hofgarten
El 10 de octubre de 1981, alrededor de 300 mil personas se reunieron en Bonn, entonces la capital de la República Federal, para protestar contra el armamento nuclear. La última reunión en el Hofgarten de Bonn se convirtió en una de las manifestaciones más impresionantes de la historia del movimiento alemán por la paz.
Imagen: picture-alliance/dpa/K. Rose
"Reunión de los valientes..."
"...no de los temerosos". Así describió el político del SPD Erhard Eppler, uno de los actores clave en el movimiento por la paz, al mitin de Bonn. Las palabras de Eppler se referían a que justamente quienes expresaban temor a la guerra eran valientes por ello.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Athenstädt
Bloqueo por la paz
En septiembre de 1983, los opositores a las armas nucleares bloquearon el depósito de armas de EE.UU. en Mutlangen. Entre ellos estaban el Nobel de Literatura Heinrich Böll y su esposa, Annemarie. Böll dijo que estaba allí "porque sería muy fácil defender algo tan primordial solo desde mi escritorio. También deseo solidarizarme con todas aquellas personas que tanto se sacrifican".
Imagen: picture-alliance / dpa
Críticas desde las Fuerzas Armadas
Uno de los opositores al rearme más famosos fue el general de división Gert Bastian. Junto con la política Petra Kelly, protestó contra el despliegue de misiles nucleares de mediano alcance en Europa. En 1983, ambos fueron de los primeros políticos del partido ecologista Los Verdes en ser electos para ingresar al Parlamento alemán.
Imagen: AP
Objetivos comunes en Occidente y Oriente
Muchas personas también tomaron las calles en la parte oriental de Alemania. "Espadas en arados" fue el lema del movimiento por la paz allí. Fue inventado en 1980 por el joven pastor Harald Bretschneider. Desde las filas de los activistas por la paz de Alemania oriental también surgió un movimiento de protesta contra el sistema político de la RDA.
Imagen: DW/W. Nagel
Logro I: desarme en el Este
El tratado INF llevó el desarme masivo del potencial nuclear a ambos lados del Telón de Acero. Esta foto de 1989 muestra una serie de misiles soviéticos SS-20 destruidos.
Imagen: picture-alliance/akg-images/Russian Picture Service
Logro II: desarme en Occidente
Los estadounidenses también retiraron sus armas nucleares de Europa. En 1988 abrieron el depósito de Mutlangen para la prensa internacional. Luego se llevaron los cohetes Pershing II a EE.UU., donde fueron desarmados. El peligro de que Europa pudiera convertirse en el escenario de una guerra nuclear parecía haber acabado.