El gobierno ruso pretende recaudar hasta 2017 unos 22.500 millones de euros (32.210 millones de dólares) con un gran programa de privatizaciones, que prevé la venta de su participación en empresas como la petrolera Rosneft y la aerolínea Aeroflot, según informó el viceprimer ministro Igor Shulalov.

Hace poco, el presidente ruso, Dmitri Medvedev, había criticado como demasiado "modesto" el programa de privatizaciones de su país y anunció modificaciones para principios de agosto. Según medios rusos, podría tratarse del mayor plan privatizador desde los años 90. (dpa)