Rusia ve posibilidad de reinicio de las relaciones con la UE
18 de diciembre de 2019
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, cree que la remozada Unión Europea "es una oportunidad para nuevo punto de partida". Rusia y la UE son, a pesar de todo, “importantes socios comerciales”, dijo.
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"El comienzo de un nuevo ciclo institucional en la UE abre objetivamente la posibilidad de un 'nuevo punto de partida' en nuestras relaciones", escribió Lavrov en el periódico 'Rossiískaya Gazeta' con motivo del trigésimo aniversario de la firma del acuerdo de cooperación entre la Unión Soviética y las Comunidades Europeas.
El jefe de la diplomacia rusa destacó que "hay cada vez más señales" de que los socios europeos "toman conciencia de la anormalidad del actual estado de cosas" entre ambas partes. "Después de cierto estancamiento, se ha retomado la dinámica de interacción con la mayoría de los Estados de la UE", constató, para añadir que se han establecido los primeros contactos con los nuevos dirigentes de la Unión Europea, que asumieron sus cargos a comienzos de mes.
Rusia y UE, a pesar de todo, son "importantes socios comerciales"
Subrayó que, pese a las divergencias, Rusia y la UE son importantes socios comerciales, y destacó que, "si no fuera por la postura sesgada de la Unión en el contexto de los acontecimientos ucranianos", el intercambio comercial entre Rusia y el bloque comunitario podría llegar al medio billón de dólares.
Según Lavrov, la responsabilidad del actual estado de las relaciones entre Moscú y Bruselas recae exclusivamente en Occidente. "Lamentablemente, muchos en Occidente comenzaron a ver la perspectiva europea común solo a través del prisma de la 'victoria en la Guerra Fría", señaló.
El ministro agregó que en lugar de la cooperación en pie de igualdad se asentó la "ilusión de que la seguridad euroatlántica debe edificarse solo en torno a la OTANy que el concepto Europa debe asociarse exclusivamente con la Unión Europea", y que todo lo demás "debe girar en torno a estos 'centros de legitimidad".
En el caso concreto de las relaciones con la UE, "cada vez con mas frecuencia hemos sido testigos de la 'absolutización' de las normas supranacionales de la Unión Europa y de los intentos de aplicarlas retroactivamente a los demás países", subrayó.
jov (efe, LaVanguardia)
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¿Guerra Fría recargada?
Con la suspensión del tratado nuclear INF, una de las principales iniciativas de desarme de los años 80 ha sido archivada. Este acuerdo fue un mérito de la diplomacia y del movimiento por la paz. Aquí una revisión.
Imagen: picture-alliance/dpa/P. Zinken
Rearme verbal y material
EE. UU. suspendió primero su participación en el tratado nuclear INF durante seis meses, y un día después, lo hicieron los rusos. Por el momento, estas decisiones ponen fin a una fase de tres décadas de entendimiento y desarme entre las principales potencias. Los militares y los políticos participaron en este pacto, igual que la sociedad civil, que se movilizó masivamente en los años ochenta.
Imagen: picture-alliance/dpa/P. Zinken
Arsenal del terror
El INF fue uno de varios tratados diseñados para frenar el terrorífico arsenal atómico creado por el rearme de la Guerra Fría. Aquí hay un misil Pershing II de EE.UU. equipado con una cabeza nuclear en la base estadounidense Mutlangen, en Baden-Württemberg (Alemania).
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Brindis por el entendimiento
El avance hacia el tratado INF fue logrado por el entonces presidente de EE. UU. Ronald Reagan (izquierda) y el líder soviético Mijail Gorbachov (derecha) en diciembre de 1987. Tras su firma en Washington, ambos políticos presionaron para un nuevo comienzo en las relaciones Este-Oeste.
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Línea directa
Una de las grandes preocupaciones durante la Guerra Fría fue que las dos grandes potencias podrían declararse la guerra entre sí por un simple error de comunicación. Es por eso que los ingenieros de ambos países establecieron la llamada "línea directa" en 1963: una conexión directa entre Washington y Moscú. Esta imagen muestra un télex en el Pentágono en 1963.
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Entre dos frentes
Durante la Guerra Fría, el Telón de Acero corrió por el centro de Alemania. La República Federal de Alemania (RFA) estaba vinculada a Occidente, y la República Democrática Alemana (RDA) a la esfera de influencia oriental. En el caso de una guerra nuclear, el Gobierno federal tenía su propio búnker cerca de Ahrweiler, en su sede ubicada en Bonn.
Imagen: DW/Maksim Nelioubin
Gobierno subterráneo
En caso de una guerra nuclear, el Gobierno de Alemania Occidental debía continuar trabajando. Por lo tanto, el búnker estaba equipado con todo lo necesario. En el subsuelo también había una sala de reuniones con colores cálidos que supuestamente aliviaban el horror del búnker.
Imagen: DW/Maksim Nelioubin
¿Guerra nuclear? No, gracias
El temor a una posible guerra nuclear también impulsó a gran parte de la población a manifestarse. A fines de la década de 1970 surgió un movimiento por la paz que durante años exigió desarme y entendimiento. Aquí hay un pin correspondiente a una de las reuniones celebradas en Bonn, en octubre de 1981.
Imagen: HDG
Demostración histórica en el Hofgarten
El 10 de octubre de 1981, alrededor de 300 mil personas se reunieron en Bonn, entonces la capital de la República Federal, para protestar contra el armamento nuclear. La última reunión en el Hofgarten de Bonn se convirtió en una de las manifestaciones más impresionantes de la historia del movimiento alemán por la paz.
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"Reunión de los valientes..."
"...no de los temerosos". Así describió el político del SPD Erhard Eppler, uno de los actores clave en el movimiento por la paz, al mitin de Bonn. Las palabras de Eppler se referían a que justamente quienes expresaban temor a la guerra eran valientes por ello.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Athenstädt
Bloqueo por la paz
En septiembre de 1983, los opositores a las armas nucleares bloquearon el depósito de armas de EE.UU. en Mutlangen. Entre ellos estaban el Nobel de Literatura Heinrich Böll y su esposa, Annemarie. Böll dijo que estaba allí "porque sería muy fácil defender algo tan primordial solo desde mi escritorio. También deseo solidarizarme con todas aquellas personas que tanto se sacrifican".
Imagen: picture-alliance / dpa
Críticas desde las Fuerzas Armadas
Uno de los opositores al rearme más famosos fue el general de división Gert Bastian. Junto con la política Petra Kelly, protestó contra el despliegue de misiles nucleares de mediano alcance en Europa. En 1983, ambos fueron de los primeros políticos del partido ecologista Los Verdes en ser electos para ingresar al Parlamento alemán.
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Objetivos comunes en Occidente y Oriente
Muchas personas también tomaron las calles en la parte oriental de Alemania. "Espadas en arados" fue el lema del movimiento por la paz allí. Fue inventado en 1980 por el joven pastor Harald Bretschneider. Desde las filas de los activistas por la paz de Alemania oriental también surgió un movimiento de protesta contra el sistema político de la RDA.
Imagen: DW/W. Nagel
Logro I: desarme en el Este
El tratado INF llevó el desarme masivo del potencial nuclear a ambos lados del Telón de Acero. Esta foto de 1989 muestra una serie de misiles soviéticos SS-20 destruidos.
Imagen: picture-alliance/akg-images/Russian Picture Service
Logro II: desarme en Occidente
Los estadounidenses también retiraron sus armas nucleares de Europa. En 1988 abrieron el depósito de Mutlangen para la prensa internacional. Luego se llevaron los cohetes Pershing II a EE.UU., donde fueron desarmados. El peligro de que Europa pudiera convertirse en el escenario de una guerra nuclear parecía haber acabado.