Las medidas de seguridad se han reforzado una vez más en Sajonia, después de que el virus H5N1 hiciera su primera aparición en Alemania, en un criadero de la localidad de Wermsdorf. Sus aproximadamente 16 mil aves de comenzaron a ser sacrificadas de inmediato y lo mismo está ocurriendo con aproximadamente 14 mil las aves de otras granjas ubicadas en las cercanías de dicho foco de gripe aviar. En total se eleva así a 30 mil el número de pavos, patos, gansos y pollos sacrificados, en un esfuerzo por contener la propagación de la enfermedad entre las aves de corral.

Nerviosismo en el mercado

Por otra parte, se ha dispuesto la destrucción de todos los productos elaborados con animales del criadero afectado en el lapso de las últimas tres semanas. Ese margen de tiempo fue establecido debido a que equivale el tiempo de incubación del virus H5N1. Las autoridades afirman que se seguirá con precisión la pista de la carne procedente de esta empresa avícola, mientras su propietario, Lorenz Eskildsen, aseguró a la televisión germana que "se ha garantizado que no se ofrezca carne de este criadero en el mercado".

Pese a que los expertos y las autoridades sanitarias aseguran que, por el momento, no existe peligro para la salud de la población, la aparición del virus de la gripe aviar en un criadero sin duda produce impacto en la opinión pública y en el consumo de carne de ave y huevos. La confederación de la industria avícola alemana reconoce que hay en el sector gran preocupación y nerviosismo. La reducción de la demanda de sus productos ha sido cifrada en unos 150 millones de euros y la tendencia a la baja es progresiva.

Continúa la propagación

Las noticias procedentes de otros países tampoco ayudan a calmar los ánimos. En Egipto se informó de la muerte de una joven de 16 años, víctima del virus H5N1. Por otra parte, en gran Bretaña se confirmó el primer caso de gripe aviar en un cisne, hallado muerto en la costa escocesa.

En el caso de lo ocurrido en la granja de Sajonia, los esfuerzos se concentran ahora en descubrir la forma en que se produjo el contagio de las aves de corral. Curiosamente, los que contrajeron primero el virus fueron los pavos, que se mantenían encerrados desde hacía tiempo por disposición oficial, y no los gansos, que podían salir al exterior por una horas al días, gracias a un permiso especial para este tipo de aves.