"Estamos sentando un precedente que puede servir de modelo a otros conflictos armados en el planeta", aseguró. El mandatario subrayó la importancia del acuerdo y la dimensión internacional del mismo. "Cuando países que han estado en conflicto armado retoman el camino del diálogo, se abren nuevos horizontes para todos. Esto ha requerido y requiere coraje y audacia, lo cual no significa falta de responsabilidad", dijo.

Santos recordó los detalles del acuerdo alcanzado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) hace apenas unos días en Cuba, entre ellos la fecha estimada de terminación del conflicto.

"Acordamos (con las FARC) una fecha límite para firmar el acuerdo final que terminará nuestro conflicto armado: será, como máximo, el 23 de marzo de 2016", afirmó Santos.

Además, recordó que las FARC comenzarán a dejar las armas "a más tardar a los 60 días luego del acuerdo final". "Se logró (en La Habana) un acuerdo sobre el que era, tal vez, el mayor obstáculo para firmar la paz: un sistema de justicia transicional que garantiza la no impunidad para los delitos mas graves cometidos", anunció.

Las víctimas como prioridad

Santos aclaró que el acuerdo adoptado "respeta la normatividad y los principios del derecho internacional y de nuestra propia Constitución".

Asimismo, recordó que los pactos colocan "por primera vez" el derecho de las víctimas a la justicia, a la verdad, a la reparación y a la no repetición en el centro de la solución del conflicto".

El dirigente participó en la segunda jornada del debate de la Asamblea General de la ONU, que celebra su 70 aniversario, y que hasta el sábado reunirá a 150 jefes de Estado y de gobierno, así como ministros y otros políticos que representan a los 193 estados integrantes de Naciones Unidas.

JOV (efe, europapress)