El anuncio realizado por el gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia sobre el acuerdo que lograron en uno de los puntos más sensibles de las negociaciones de paz (el narcotráfico y cultivo de drogas) fue recibido con beneplácito por muchos sectores de la población, aunque la cercanía de las elecciones presidenciales ha puesto más pimienta al asunto y algunos ven una intención electoral en todo esto.

El acuerdo, que dice que “tanto el gobierno como las FARC reconocemos que el narcotráfico ha alimentado el conflicto que se vive en Colombia”, busca combatir el consumo y la producción, así como la sustitución de cultivos en una lucha que cuenta con dos aliados: “Ambas partes manifiestan su firme compromiso con la solución definitiva del problema de las drogas”, agrega el comunicado dado a conocer el viernes (16.05.2014).

El presidente Juan Manuel Santos aplaudió el avance en las negociaciones con la mayor guerrilla del país, y sostuvo que “logramos este acuerdo sobre la lucha contra el narcotráfico, que es una muy buena noticia no solo para Colombia, sino para la región y el mundo entero”. El acuerdo es el tercero que logra la mesa que comenzó en noviembre de 2012 y que ahora tiene otros tres puntos para negociar.

Malestar opositor

Santos recordó que “esto es lo más lejos que se ha llegado en el camino para terminar nuestra guerra” y pidió a la ciudadanía tener “confianza en el proceso”, que busca acabar con un conflicto que ha golpeado Colombia por casi medio siglo. El primer acuerdo, sobre tierras y desarrollo rural, se logró en mayo de 2013, y el segundo, sobre participación política, en noviembre del mismo año.

La noticia también alegró al representante de la ONU en el país sudamericano, Fabrizio Hochschild, quien dijo que la firma de este acuerdo convertía el proceso en algo “irreversible”, según una entrevista publicada este sábado (17.05.2014). Hochschild se mostró “emocionado” y añadió que si bien “aún hay temas muy difíciles” por discutir, lo que se ha avanzado muestra “madurez” y reconoció que el acuerdo “tiene un impacto en la lucha global contra las drogas”.

Sin embargo, otros sectores no lo ven con tan buenos ojos. Para la candidata presidencial conservadora Marta Lucía Ramírez, el hecho de que el acuerdo se dé a conocer nueve días antes de las elecciones, donde también participará el presidente Santos, “es una manera de apoyar su reelección”. Una opinión similar tiene el Centro Democrático, plataforma del exmandatario Álvaro Uribe y que postula a Óscar Iván Zuluaga a la presidencia. Para ellos, este acuerdo “más bien plantea la urgencia de las FARC en impulsar la reelección” de Santos.

DZC (dpa, Reuters, EFE)