Juan Manuel Santos admitió ayer (11.05.2015) que hace unas semanas permitió que los líderes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echevarry, alias “Timochenko”, y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), Nicolás Rodríguez Bautista, alias “Gabino”, se reunieran en Cuba. Aunque el presidente de Colombia no indicó cuando tuvo lugar el encuentro, medios locales coinciden en que fue hace pocas semanas. Además, indican que Santos suspendió temporalmente las órdenes de captura sobre los jefes de las guerrillas para permitir su viaje a La Habana, sede de los diálogos de paz con las FARC.

En su comparecencia desde la Casa de Nariño, el presidente colombiano explicó que su decisión fue respaldada por Cuba y Noruega, países garantes de la negociación, y de Chile y Venezuela, en su condición de acompañantes del proceso.

“En mi condición de jefe de Estado del gobierno facilité, con el apoyo de los países garantes y acompañantes, las condiciones para que este encuentro se llevara a cabo con el único propósito de lograr avances en la búsqueda del fin del conflicto”, aclaró el mandatario.

Durante su comparecencia, Santos aseguró que, como jefe de Estado, su obligación es “buscar la paz como valor supremo para todos los colombianos (…), y no voy a claudicar en ese propósito”. Ante la posible duda sobre su decisión, el presidente colombiano explicó que el país “puede estar seguro de que todas mis actuaciones en la búsqueda de la paz han estado y estarán en el marco de nuestra Constitución y de las leyes que juré cumplir”.

No es la primera vez que Santos autoriza este tipo de viajes. El pasado mes de octubre de 2014, el presidente reconoció que permitió que “Timochenko” viajara a La Habana para agilizar la toma de decisiones de los negociadores de la guerrilla. Entonces, la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes abrió una investigación preliminar con base a una denuncia interpuesta contra el presidente por el abogado Guillermo Rodríguez por los presuntos delitos de prevaricato por omisión y traición a la patria.

Además de los viajes, Santos reconoció ayer que aprobó también el regreso de dos miembros de las FARC a Colombia para que en las próximas semanas “participen en las labores del desminado humanitario” que comenzarán pronto en los departamentos de Antioquia (noroeste) y Meta (centro del país). Según el presidente, “una vez concluyan esa tarea, regresarán a La Habana para continuar su participación en la mesa de negociación”.

JC (EFE, dpa)