En medio de críticas internas por su actitud frente a las sanciones a Rusia y el suministro de armas pesadas a Ucrania, el canciller alemán, Olaf Scholz, presidió un Consejo de Ministros extraordinario, a puerta cerrada, centrado en la invasión rusa al país vecino.

Lo que del presidente ruso, Vladimir Putin tiene ahora es "una OTAN más fuerte, es la organización de seguridad más fuerte también en los estados del este del área de la OTAN, lo que tiene es una Unión Europea unida".

En respuesta al ataque ruso, se formó una comunidad "que aseguró que Ucrania recibiera apoyo militar con armamentos que se entregaron a Ucrania", dijo Scholz. "Alemania también está participando en esto sin cambios y seguirá haciéndolo, siempre tomando las decisiones correctas y apropiadas en el momento", aseguró Scholz.

Tras asegurar más apoyo militar a Ucrania, Scholz insistió en que las preguntas que han surgido a partir del cambio en la estrategia militar alemana, como consecuencia de la guerra en Ucrania, fueron discutidas cuidadosamente en esta reunión.

Según el canciller alemán, el gabinete también discutió la ley de aplicación de sanciones planificada en la reunión a puerta cerrada, que tiene como objetivo garantizar una mejor aplicación de las medidas punitivas "contra todos aquellos que se benefician del régimen de Putin", dijo el canciller. Su Gobierno quiere crear la base legal para que las sanciones se implementen con éxito.

Los ministros se reunieron en un retiro de dos días en el castillo de Meseberg, en Brandeburgo, cerca de Berlín. Scholz habló al final de la conferencia junto con el vicecanciller Robert Habeck (Verdes) y el ministro federal de Finanzas, Christian Lindner (FDP).

rml (afp, reuters, dpa, noticia en desarrollo)