En lo que va de año, el número de inmigrantes que llegaron a España de forma ilegal se redujo en un 62 por ciento, según los datos ofrecidos en Madrid por el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera.

Frente a los 15.400 que llegaron ilegalmente a España de enero a agosto de 2006, en el mismo período de este año han llegado 5.700 y, de ellos, unos 4.500, el 80 por ciento, fueron repatriados.

"Salen menos porque saben que van a ser repatriados", manifestó Caldera, quien aseguró que en los países de origen se están empezando a convencer de que no merece la pena tratar de entrar ilegalmente en España.

Calder apuntó también a la cooperación de España con países como Senegal, Mali, Mauritania, Gambia y Guinea Bissau es un factor que influye en estos "resultados positivos". El Gobierno socialista español, aseguró, continuará extendiendo ese trabajo conjunto a otros países del "continente más pobre del mundo", en referencia a África.

En 2006, sólo a las Islas Canarias llegaron unos 31.000 inmigrantes a bordo de embarcaciones precarias con las que, desde las costas africanas, miles tratan anualmente de entrar ilegalmente en territorio español realizando una arriesgada travesía.

Organizaciones humanitarias cifran en cientos los que mueren en el viaje. Otra de las vías elegidas desde África para entrar en España es cruzar el Estrecho de Gibraltar desde el norte de Marruecos para alcanzar las costas andaluzas. (dpa)