Balance anual
16 de noviembre de 2011Revisando los números, Alemania puede estar más que satisfecha con su rendimiento: en el 2011 se jugaron 13 partidos, 9 de ellos terminaron con victorias, 3 en empates, y se encajó una única derrota, en un partido amistoso contra Australia. En juegos oficiales, los correspondientes a la eliminatoria a la Eurocopa 2012, se encarrilaron 6 triunfos (100 por ciento), y se consiguieron 21 goles, encajando sólo 6; el promedio global del año es de +19 (36/17).
Los experimentos tácticos
Pero quizás lo más importante del año para la selección alemana fue la introducción de distintas variantes tácticas que enriquecieron sus alternativas de juego. Joachim Löw utilizó todas las posibilidades a su disposición para modificar los planteamientos de su equipo, para probar en condiciones reales formaciones en las que pudo utilizar y explotar al grueso número de jugadores con los que cuenta.
En la impactante victoria de cierre del 2011, contra Holanda, subcampeón del mundo y segundo en el escalafón internacional de selecciones, el entrenador alemán presentó el que casi con seguridad será su esquema táctico en la Eurocopa 2012, un 4-2-3-1, en el que uno de los dos jugadores parados delante de la línea defensiva (el designado es Toni Kroos) se suma a la tarea de generar fútbol ofensivo, en posesión del balón, haciendo pareja con el creativo Mesut Özil.
Cuatro días antes, contra Ucrania, Löw había sorprendido a todos plantando en la cancha un desconocido 3-5-2; tres defensores centrales al frente del arquero, algo que nunca se había visto en Alemania. El entrenador –a quien el experimento de todas formas le funcionó pues se obtuvo un empate a tres goles- justificó su decisión (conocida por los jugadores apenas unos pocos minutos antes de empezar el partido) con dos argumentos: el equipo alemán debe estar preparado para imprevistos en los que es necesario repentizar; en el mediocampo hay muchos futbolistas de calidad en la convocatoria y así se le abre espacio a muchos de ellos.
Dos opciones reales
Ahora bien, las probabilidades de que Alemania recurra nuevamente al 3-5-2 usado en Ucrania son limitadas. En cambio, la formación 4-1-4-1 con la que se derrotó a Brasil en Stuttgart, en el mes de agosto, sí será una opción real que le permitirá a los jugadores de Löw, en la Eurocopa 2012, concentrarse en el juego ofensivo, dejando a un único integrante de la selección (Bastian Schweinsteiger tendrá esa responsabilidad) como líder de las labores de recuperación.
El 4-1-4-1 puede ser considerado como el máximo logro táctico de Alemania en los últimos años; Joachim Löw, quien repetidamente ha expresado que la evolución del fútbol que él contempla con la selección exige que se prescinda de ocupar a dos jugadores del mediocampo con trabajos defensivos (el famoso doble seis), encontró aquí la alternativa ideal que soluciona ese dilema.
Otra opción real de formación táctica, pensando en la Eurocopa 2012, es el 4-4-2, con dos delanteros (Miroslav Klose, quien será titular, más Mario Gómez) y un mediocampo plantado en forma de diamante. Si bien en este 2011 el planteamiento no fue utilizado, Alemania tampoco necesita experimentar demasiado con él pues hasta no hace mucho tiempo fue el andamio futbolístico del equipo.
Los ganadores del 2011
El año que termina también le sirvió a varios futbolistas para elevar su valor dentro de la selección alemana. El mayor ganador se llama Toni Kroos; el jugador del Bayern Múnich ofrece, según el entrenador Löw, el perfecto equilibrio entre defensa y ataque en el mediocampo.
De entre los juveniles, se destacan Mario Götze (Dortmund) y Andre Schürrle (Leverkusen), quienes sin mayores inconvenientes se acoplaron al equipo principal y aspiran incluso a la titularidad en la Eurocopa. Löw, en este 2011, invitó a la selección a seis novatos: Sven y Lars Bender, Benedikt Höwedes, Marco Reus, Ilkay Gündogan y Ron-Robert Zieler.
A los alemanes, antes de iniciar su participación en la Eurocopa en condición de favoritos al título, en especial luego de su exhibición de poder ante Holanda, apenas les resta un partido amistoso por jugar, contra Francia, en Bremen, el 29 de febrero próximo. “Estoy muy contentó con el balance que arroja el 2011, y la verdad, si por mí fuera, la Eurocopa podría empezar mañana mismo” resumió Joachim Löw el año de la selección alemana.
Autor: Daniel Martínez
Editor: José Ospina Valencia