No abrazarse, no darse las manos ni besarse son algunas de las medidas que se han adoptado en los países de África Occidental afectados por el virus del ébola para evitar nuevos contagios. Estas precauciones, sin embargo, no son nada frente al toque de queda que dictó el gobierno de Sierra Leona, decisión excepcional que terminó el domingo y que, en primera instancia, no será extendida a pesar de que fue calificada como un “éxito”.

La medida fue acatada por la mayoría de los seis millones de habitantes del país, informó el Ministerio de Salud este lunes (22.09.2014). Entre el viernes y el domingo más de 30.000 trabajadores sanitarios visitaron casa por casa para explicar a la población las características del virus y cómo detectar posibles casos. En los recorridos, 56 nuevos casos de la enfermedad fueron informados. “Si no los hubiésemos detectado, habría habido mayor propagación”, dijo un portavoz del Ministerio.

El hallazgo de 92 nuevos cadáveres que presentan indicios del ébola es otro tema que preocupa a las autoridades sierraleonenses. Debido a que la enfermedad se contagia por contacto con los fluidos corporales, es imprescindible enterrar rápidamente a las personas que fallecen como consecuencia del virus. En los últimos días, más de 60 cadáveres de pacientes de ébola fueron enterrados.

Paciente español, grave

Por otro lado, el médico y religioso español Manuel García, de 69 años, se encuentra grave en el hospital La Paz-Carlos III, donde se prepararon especialmente para recibirlo. El paciente presenta un cuadro importante de deshidratación y una afectación hepato-renal marcada, dijeron los especialistas que lo atienden. El religioso llegó en la madrugada de este lunes a Madrid, procedente de Sierra Leona.

García es director médico de la Orden de San Juan de Dios en Lunsar, Sierra Leona, donde pasó los últimos doce meses. La semana pasada comenzó a mostrar síntomas del ébola, aunque no existe claridad sobre cómo contrajo el mal. Este lunes también se informó que García no podrá recibir tratamiento con el fármaco experimental Zmapp, debido a que se agotaron sus existencias. El brote de ébola ya ha provocado más de 2.600 muertes.

DZC (dpa, Europa Press, EFE)