Este martes (29.10.2013) ha sido un día movido en Siria. El hombre fuerte de Damasco, Bashar al Assad, destituyó al vice primer ministro, Kadri Yamil, por extralimitarse en sus competencias. Yamil, quien fundó el partido opositor Voluntad del Pueblo, pero pasó a formar parte del Gobierno en junio de 2012, había sido criticado severamente por no coordinar sus acciones con otros funcionarios y pronunciarse públicamente sin autorización.

"Yamil fue despedido porque dejó su puesto de trabajo sin permiso previo y no cumplió con sus tareas”, indicó un comunicado difundido por la televisión estatal siria. Aún no está claro a qué motivo específico se debe la conspicua destitución: Yamil había volado a Ginebra recientemente, sostenido un encuentro con funcionarios estadounidenses y ofrecido declaraciones sobre la Conferencia de Paz para Siria que tendrá lugar en esa ciudad el 23 de noviembre.

El vice primer ministro, que tiene buenas relaciones con el Gobierno ruso, también había viajado a Moscú hace unos días. Muchos le reprochan el hecho estar constantemente en el extranjero y de no atender sus responsabilidades cabalmente. El anuncio de la destitución de Yamil coincidió con la reunión en Damasco de Lakhdar Brahimi, enviado especial de la ONU y la Liga Árabe a Siria, con representantes de la oposición.

Con la esperanza puesta en Ginebra II

Brahimi habló con Hassan Abdel Azim, presidente del Comité de Coordinación Nacional para el Cambio Democrático, tolerado por Assad porque, a diferencia de otros grupos opositores, se ha manifestado a favor de reformas políticas por la vía pacífica. Brahimi conversará también con el ministro sirio de Exteriores, Walid al Moallem, en el marco de sus esfuerzos por impulsar una solución no militar para el conflicto sirio.

Si las conversaciones con el ministro "van bien", Brahimi se reunirá el miércoles (30.10.2013) con Assad, con todo y que Damasco ha acusado del enviado de la ONU y de la Liga Árabe de estar parcializado a favor dela oposición. La meta de Brahimi es propiciar la asistencia de todas las partes en discordia a la Conferencia Ginebra II, donde se trazará un plan para terminar la guerra que ha matado a 100.000 personas.

Otra consecuencia de la guerra civil siria es la precarización del sistema sanitario nacional y la consecuente aparición de enfermedades. Esa es la otra mala noticia de este 29 de octubre: un brote de polio ha sido corroborado entre niños pequeños por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esta agencia de las Naciones Unidas advierte que se trata de los primeros casos en Siria desde 1999 y que este foco de infección podría crecer hasta expandirse por todo el Cercano y Medio Oriente.

ERC ( dpa / Reuters )