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Sociedad

Sobrevivientes de naufragio en 1994 piden investigación

28 de septiembre de 2019

Schweden Stockholm Gedenkfeier 25 Jahre Untergang MS Estonia Kronprinzessin Victoria
Imagen: picture-alliance/TT/J. Henriksson

Las personas rescatadas del ferry "Estonia", en cuyo naufragio en el mar Báltico en 1994 murieron 852 personas, pidieron este sábado (28.09.2019) una investigación independiente durante una ceremonia que recordó la peor catástrofe marítima civil en Europa.

La princesa heredera Victoria de Suecia realizó una ofrenda floral ante el monumento construido en memoria de las víctimas en un jardin de Estocolmo. "La catástrofe del 'Estonia' sacudió nuestro país (...) Cada uno de nosotros ha sentido dolor y ausencia", dijo por su parte el primer ministro sueco, Stefan Lofven.

El ferry se hundió en menos de media hora el 28 de septiembre de 1994 en plena tempestad, cuando realizaba la ruta entre Tallin, la capital de Estonia, y Estocolmo. A bordo viajaban 989 personas entre pasajeros y miembros de la tripulación.

Un total de 137 personas pudieron ser rescatadas con vida de las aguas heladas. Entre ellas, Kent Harstedt, un exdiputado que señaló este sábado a las autoridades. "El tiempo de la justicia ha llegado (...) No ha habido una investigación internacional independiente, nadie ha asumido sus responsabilidades", dijo, durante la ceremonia.

Pese a las demandas de supervivientes y familias, el barco está aún en el fondo del mar Báltico, una especie de "cementerio marino" en virtud de un acuerdo entre Suecia, Estonia y Finlandia. En 1997, una comisión de investigación de los tres países concluyó que había habido un fallo en el sistema de cierre de la puerta corredera de proa, lo que permitió que el agua entrara más rápidamente a la cubierta reservada a los vehículos.

El armador indemnizó a rescatados y familiares de los desaparecidos con un fondo de compensación de unos 130 millones de euros, pero las víctimas no pudieron reclamar compensaciones por daños morales, ya que la ley sueca no reconoce este daño como tal.

Posteriormente, 1.116 demandantes pidieron al certificador francés del ferry, Bureau Veritas, y a su fabricante alemán, Meyer-Werft, alrededor de 40 millones de euros (unos 45 millones de dólares) por el daño moral que sufrieron. El tribunal francés estimó que no había base para indemnizarlos porque los solicitantes no presentaron pruebas sobre "la existencia de una falta grave o intencional imputable a Bureau Veritas y/o Meyer-Werft". (AFP)

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