Los observadores estiman que el problema se podría resolver si Irán se compromete oficialmente antes de la reunión a aceptar los principios de las negociaciones acordados por Rusia y Estados Unidos. Entre esos principios figura la formación de un gobierno de transición con participación de la oposición. Un portavoz de la Coalición Nacional Siria, el principal bloque opositor del presidente Assad, dijo que solo aceptará una presencia de Irán, si este país retira primero todos sus combatientes y asesores militares de Siria. La oposición ha fijado además una fecha límite para retirar la invitación a Irán.

Por su parte, Irán aceptó la invitación del secretario general de Naciones Unidas para asistir a las negociaciones, pero rechaza cualquier tipo de condición previa que se ponga a su presencia en la Conferencia: "Irán asistirá a Ginebra 2 sin precondiciones", dijo la agencia ISNA ISNA, citando a la portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Marzieh Afjam. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, explicó que había hablado en extenso con el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Javad Zarif, los días previos y que creía que Teherán apoyaba el plan de Ginebra 2012 para las negociaciones sobre Siria. "Me ha asegurado que, como todos los otros países invitados a la apertura en Montreux, Irán entiende que la base de las negociaciones es la implementación completa del comunicado de Ginebra del 30 de junio de 2012", dijo.

La UE saluda la presencia de Irán en Ginebra

La Unión Europea saludó la participación de Teherán en la Conferencia. Los ministros del Exterior, reunidos en Bruselas, señalan en un comunicado de la reunión emitido hoy (20.01.2014) que el objetivo de la cita en Montreux es poner en marcha los principios acordados en junio de 2012, entre ellos el gobierno de transición. El ministro de Exteriores francés, Laurent Fabius, dijo que la carta de invitación de Ban "deja claro que el objetivo de la conferencia es el establecimiento de un gobierno de transición en Siria que tenga plenos poderes ejecutivos". "Dadas esas condiciones y en interés de impulsar la paz, queda claro que ningún país podrá participar en la conferencia si no lo hace aceptando expresamente el mandato", agregó.

Sin embargo, está por ver que la celebración de la Conferencia de Paz sobre Siria se celebra en las condiciones adecuadas. El Departamento de Estado norteamericano se pronunció en contra de la participación de Irán mientras que este país no acepte públicamente los principios de las conversaciones. Los opositores sirios cuentan con el apoyo económico y de armas de Arabia Saudí, uno de los principales rivales de Irán. Arabia Saudí tampoco desea la presencia de Irán en Ginebra. La participación de Irán en las negociaciones ha sido tema de debate desde hace semanas entre los que apoyan al presidente sirio Bashar Al Assad y sus adversarios. Hasta la fecha, Irán había rechazado abandonar su apoyo a Al Assad como condición para acudir a la cita y tampoco aceptó ir solo como observador.

MS (dpa/Reuters)