Hasta hace poco no sabían cuántos eran, qué hacían ni dónde estaban. Los científicos y profesionales latinoamericanos repartidos por universidades, institutos de investigación y empresas alemanas muchas veces ni siquiera se conocían entre sí, aunque trabajaban en proyectos afines o  complementarios.

Pero desde hace unos años el panorama está cambiando. La creación de las llamadas redes de talentos y científicos de diferentes países latinoamericanos como Argentina, México y Chile está potenciando el trabajo conjunto y el intercambio con Latinoamérica desde Alemania.

Estas redes son un registro, un punto de contacto entre los connacionales y también prestan ayuda práctica de todo tipo: “Desde becarios que no sabían dónde quedarse o cómo sacar su seguro de salud hasta apoyo para postular a beneficios, contactar a otros investigadores del mismo campo o aplicar para un trabajo”, explica Alejandro Flores, fundador y secretario general del Capítulo Alemania de la Red de Talentos Mexicanos en el Exterior.

El Capítulo Alemania fue el primero tras Estados Unidos y Canadá y como pionero en Europa ha ayudado a la creación de grupos similares en otros países de la región y de otras nacionalidades. Hoy cuenta con 127 miembros y una plataforma en internet que ha conformado una activa red social.

“Queremos generar las condiciones para que cada uno que traiga una idea u ofrezca ayuda para otros, oportunamente pueda canalizar esta información”, agrega Flores.

Científicos en red
“Hace unos años se detectó que en Alemania había muchos egresados de universidades argentinas que no se conocían entre ellos y con mucha experiencia e información que intercambiar”, cuenta Luis Azpiazu, encargado de negocios de la Embajada de Argentina en Berlín. Hace cuatro años crearon la Red de Científicos Argentinos en Alemania, RCAA, que ya tiene 223 miembros. Como otras redes, se reúnen una vez al año y mantienen contacto virtual en forma permanente.

Un proyecto similar acaban de iniciar el pasado mes de noviembre 70 científicos y estudiantes de postgrado chilenos, al formar la red de investigadores INVECA. “Hay muchos chilenos haciendo doctorados, master o como investigadores consolidados en Alemania en todas las áreas de la ciencia. Buscamos hacer un registro, tener una plataforma de información y conexión entre ellos y fortalecer la cooperación”, explica Mónica Cuevas, encargada de Asuntos Científicos y Académicos de la embajada de Chile en Berlín.

Fin al paradigma de la fuga de talentos
Muchos estudiantes y profesionales talentosos que un día dejaron Latinoamérica para realizar un master, doctorado o integrarse a un proyecto de investigación o empresa en Alemania, nunca regresaron a su país de origen a “devolver” lo aprendido. Lo que en un principio fue catalogado de fuga de cerebros hoy ha dado paso a un nuevo enfoque.

“Hoy día, con las comunicaciones, poco importa dónde está establecido el científico, sino hacia dónde se vuelca el resultado de esa investigación”, indica Luis Azpiazu. Los medios modernos permiten estar conectados, realizar proyectos conjuntos y aportar al desarrollo. Incluso, puede ser mucho más beneficioso para el país de origen que este “talento” permanezca en Alemania y cree lazos de intercambio, favorezca proyectos bilaterales con universidades o institutos de investigación alemanes y abone el camino para la llegada de nuevos talentos.

Para quienes deseen retornar, Argentina tiene un programa llamado Raíces, que promueve y facilita el regreso de científicos al país. Sin embargo, ésta no es una meta clara o al menos de corto plazo para muchos investigadoes y profesionales que se instalan en Alemania.

“Eso de que se tienen que regresar está anticuado- agrega Alejandro Flores-. Hoy no es necesario que los talentos vuelvan físicamente. Estamos conectados virtualmente y no hay ningún problema para participar en una conferencia y otras actividades no sólo en Alemania sino también en México”.

Emprendedores conectados
La idea es potenciar una circulación de talentos: “Acceder y aprovechar el know how, y que la experiencia y los contactos que se hacen regresen a México a través de un programa de intercambio o convenio de colaboración”, explica Alejandro Flores.

También ofrecer información útil en forma oportuna: “A veces hay llamados a concurso, plazas de investigación o profesor y también podemos apoyar en cosas prácticas, como orientar en los documentos que se necesitan”, agrega Mónica Cuevas.

La red de mexicanos ha dado cabida también a proyectos sociales, como la campaña de una de sus miembros de la sección de estudiantes para construir una escuela en un hogar de niñas de escasos recursos de Morelia. Esto ha permitido dar asesoría y recaudar fondos desde Alemania.

Con estas redes, los profesionales e investigadores están abriendo perspectivas de mayor integración, colaboración y transferencia de conocimientos entre Latinoamérica y Alemania.

Autora: Victoria Dannemann

Editor: Enrique López