Un sismo de magnitud 5,8 en la escala de Richter y 15 réplicas, de entre 2,9 y 4,2, se registraron a partir de las 2.11 hora local frente a las costas de Atacames, señaló el Instituto Geofísico (IG).
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Una persona falleció de un infarto como consecuencia de los terremotos que sacudieron esta madrugada la provincia de Esmeraldas (noroeste de Ecuador), que causaron daños materiales y el derrumbe de algunas viviendas en la zona afectada. El IG advirtió que podrían producirse "más replicas en esta zona con magnitudes menores al evento principal".
El temblor de 5,8 grados ocurrió a 10 kilómetros de profundidad y se sintió, además de en Esmeraldas, en localidades de las provincias de Guayas, Manabí, Pichincha y Santo Domingo, señaló la institución en un comunicado.
Evaluación de daños
La directora del IG, Alexandra Alvarado, confirmó a Ecuador Radio la muerte de una persona de edad avanzada a causa de un infarto debido al "susto" que le produjo el temblor y subrayó la conveniencia de mantener la calma ante este tipo de eventos.
El Servicio de Emergencias ECU 911 indicó que no se produjeron daños en las infraestructuras de la zona ni en las vías E-15 ni E-20, las más importantes de la zona.
Unidades de Riesgos de los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) iniciaron la evaluación de daños en viviendas, al igual que las autoridades del municipio de Esmeraldas, agregó la fuente.
El Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar) señaló, por su parte, que el temblor no reunió "las condiciones necesarias para generar un tsunami que afecte al Ecuador".
Presidente tuitea ánimo
"Zonas sin electricidad. Se evalúan daños. Clases suspendidas en la provincia. ¡Ánimo!", escribió en su cuenta de twitter el presidente del país, Rafael Correa.
Los temblores tuvieron lugar cerca de la zona donde el pasado 16 de abril se produjo un devastador terremoto de magnitud de 7,8 en la escala de Richter que dejó unos 670 fallecidos, miles de damnificados y millonarias pérdidas.
RML (efe, Twitter)
Ecuador, cinco meses después del terremoto
Un desastre como el de Ecuador puede representar una oportunidad de hacer las cosas mejor, opinan especialistas. ¿Cómo enfrentan esto las autoridades, los pobladores de las zonas afectadas, la asistencia internacional?
Imagen: DW/M. Banchon
La vida sigue en los albergues
La noche del 16 de abril un terremoto de 7,8 de magnitud en la escala de Richter sacudió Ecuador y devastó las provincias de Esmeraldas y Manabí. Cinco meses después, sobre todo en zonas rurales y apartadas, la población sigue viviendo en los albergues provisionales provistos por el gobierno y organizaciones internacionales de asistencia.
Imagen: DW/M. Banchon
Ecuador se reconstruye
Cuando ocurrió el terremoto del 16 de abril, las Normas Ecuatorianas de Construcción justo habían acabado de elaborarse. En un país con alto riesgo sísmico, cambiar el tipo de construcción es imperativo. Aquí una casa modelo, hecha con la caña guadúa, propia de la región. Aunque el plan de reconstrucción aún no está listo, se dice que en dos años podrían estar acabadas las 7000 viviendas perdidas.
Imagen: DW/M. Banchon
Inseguro
Las guías del nuevo código de construcción, elaboradas junto con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y el programa de Preparación para Desastres de ECHO, se entregaron rápidamente. Si bien no es algo tan visible como la entregad de frazadas o agua, requiere un intenso trabajo a nivel local y nacional y programas de formación de personal.
Imagen: DW/M. Banchon
Nuevas formas de construir
“El nuevo marco normativo sirve de aquí en adelante. Es importante no sólo que exista sino que se aplique y que se explique en las universidades para que los profesionales salgan con una conciencia diferente. El cumplimiento de esas normas puede que sí encarezca la construcción, pero salva vidas”, explica a DW Óscar Robles, de la organización Catholic Relief Services (CRS).
Imagen: DW/M. Banchon
¿Quién compra?
En las zonas más afectadas de Manabí y Esmeraldas el comercio, la agricultura , la pesca y el turismo eran las actividades económicas más importantes. Sin la infraestructura hotelera y los restaurantes, los productores no pueden colocar sus productos. Aquí Pedernales, el centro comercial de la región, cuyas microempresas vuelven tímidamente.
Imagen: DW/M. Banchon
Velar por derechos
Otra de las tareas de las organizaciones de la sociedad civil es verlar por los derechos de los más vulnerables. El problema de los embarazos adolescentes, los feminicidios y el acoso sexual, que ya tenía niveles preocupantes en Esmeraldas antes del desastre, se ha disparado con la precariedad.
Imagen: DW/M. Banchon
Ayuda humanitaria internacional
Desde un día después del terremoto, la oficina de Ayuda Humanitaria y Protección Civil (ECHO) ha estado presente en el país. Proveer de agua limpia, alimentos, albergues, medicinas y asistencia psicosocial a los damnficados ha sido el objetivo en los primeros meses después del desastre que dejó sin techo a 7000 familias. Aquí se ve una instalación sanitaria para los pescadores de La Chorrera.
Imagen: DW/M. Banchon
Trabajar en la precariedad
Aunque la situación de la mayoría de los habitantes se ha estabilizado, en albergues o en campamentos, la actividad económica está aún lejos de volver a la normalidad , sobre todo en las zonas más apartadas. La microempresa más que nunca antes es el motor de estas regiones afectadas. Comedores, tiendas, servicios de Internet funcionan en las construcciones provisorias.
Imagen: DW/M. Banchon
Miedo
"Perdimos nuestra casita que estaba recién hecha. Lloramos mucho, pero no es un dolor como perder un familiar. Mi marido es pescador, trabaja en la noche. Yo me voy a dormir donde la vecina, porque me da miedo dormir solita", cuenta una pobladora de La Chorrera.
Imagen: DW/M. Banchon
Nuevas normas, ¿nueva infraestructura?
Las poblaciones dedicadas a la pequeña pesca se han visto especialmente afectadas. Por un lado, la destrucción de la vivienda. Por otro, las nuevas normas prevén un nuevo emplazamiento de sus pobladores. Si están más alejados de la playa, a donde solían llegar los compradores directamente, ¿dónde obtendrán la infraestructura de refrigeración para conservar el producto?
Imagen: DW/M. Banchon
¿Cuándo se acaba la emergencia?
La expectativa es que en dos o tres años la fase de reconstrucción haya acabado. Ejemplos de países como Chile o Perú hablan de que el problema de la vivienda es el que más lento va. En muchos casos, el albergue transicional, diez años después, se ha convertido en permanente, explica especialistas en emergencias.
Imagen: DW/M. Banchon
Aún quedan escombros
"Las familias están seguras, los niños vuelven a las escuelas. La Policía especializada asegura la zona, el Ministerio de Inclusión Económica y Social tiene estructuras que funcionan bastante bien. Pero no es la normalidad. La familia quiere su casita. Va a llevar tiempo. El terremoto de Haití fue hace 6 años y todavía hay miles de personas viviendo en carpas", explica Óscar Robles, de CRS.