Jörg Raufeisen y Ole Plogstedt, uno repostero, el otro cocinero, fundaron hace 10 años el servicio de comidas para rockeros "RGF". Detrás de esta sigla se esconde el título "Rote Gourmet Fraktion", la "fracción gourmet roja". El nombre alemán del dúo recuerda al de la agrupación terrorista "Rote Armee Fraktion" (RAF), la "fracción armada roja", activa durante los años 70. Los cocineros no intentaban hacer revivir un viejo icono, sino encontrar un nombre que sonara mejor que "Producciones agresivas de cocina" o "Servicio de fiestas Sunshine". Lo cierto es que el nombre fue una pegada. Pero Raufeisen y Plogstedt no deben su éxito únicamente a una buena idea, sino sobre todo a sus dotes en la cocina. Ambos aprendieron sus oficios tradicionalmente y trabajaron varios años en las cocinas de hoteles y restaurantes de lujo en Berlín y Hamburgo.

En una de estas cocinas se cruzaron sus caminos, descubrieron que tenían más afinidades entre sí que con sus jefes y decidieron lanzarse a la aventura de fundar una propia empresa. Luego de varios intentos consiguieron un crédito por 60.000 marcos y el 1o. de mayo de 1993 se fundó oficialmente la "RGF".

Cocinando para los rockeros

Ahora, con una década de experiencia y habiéndose establecido como el servicio de comidas de las estrellas del rock, los gastrónomos acaban de publicar un libro contando su historia. Allí el lector se entera de detalles curiosos sobre los hábitos alimenticios de Tricky, Courtney Love o Rammstein. Ole y Jörg supieron deleitar los paladares de todos ellos y elaboraron su teoría sobre la relación entre música y cocina. "Para obtener una comida claramente estructurada, con excelentes matices de sabor, que en lugar de exigirle esfuerzos al paladar, lo acaricie, hay que escuchar melodías cortas y concisas" revelan los autores y añaden "por eso, en nuestra cocina siempre suenan ritmos rápidos de los Beatsteaks, Dead Kennedys o los Vibrators", porque de este modo "cocinamos mucho más ágilmente". Por el contrario, "quien escuche U2 o Genesis mientras cocina, no se deberá sorprender si lo invade una atmósfera paralizante de vino tinto, que hará que demore el doble de tiempo".

"Terror Turkey"

La "RGF" hace rato que alcanzó estado de culto, incluso más allá del ambiente musical. Los dos punks, radicados en Hamburgo, se caracterizan por su estilo inconfundible, lleno de humor, provocación y, por supuesto, muy buena comida. En la zona "backstage", es decir, detrás del escenario, despliegan no sólo sus instrumentos de cocina, sino que decoran el espacio con insectos gigantes de goma, calaveras y brazos humanos - de juguete, claro está. Inspirados por el punkrock, proveniente del equipo de sonido, cocinan platos como el pavo del terror, "Terror Turkey", o el pescado chatarra, "Junkfisch". Además, Ole y Jörg son verdaderos maestros de la sutil cocina vegetariana y logran que rockeros adictos a la carne aprecien las virtudes de la verdura.

En su primera obra literaria "RGF" entretiene al lector, sea gastrónomo o rockero, y ofrecen una alternativa auténtica y original a los cocineros jóvenes, pero aburridos, que están poblando los canales de televisión alemanes, desde hace varios meses.