Tenis: chileno Jarry derrota al alemán Zverev en Barcelona
23 de abril de 2019
El sudamericano, 81 del mundo, dio la sorpresa de la jornada al sacar al tercero de la ATP por 3-6, 7-5 y 7-6 (7/5).
Publicidad
El chileno Nicolás Jarry (81º del mundo) protagonizó la gran sorpresa de este martes (23.04.2019) en el Torneo de Barcelona al eliminar en segunda ronda al alemán Alexander Zverev, tercero del mundo y segundo cabeza de serie del torneo catalán.
Jarry se coló en octavos tras superar 3-6, 7-5, 7-6 (7/5) a un Zverev que no se encuentra en su mejor momento de forma, en una temporada en la que cayó en octavos en el Abierto de Australia y Montecarlo, en dieciseisavos de final en Indian Wells y en su primer partido en Miami.
Zverev perdía 3-0 en el tercer set con dos breaks cedidos antes de ponerse 3-3. El alemán llegó a disponer de una bola de partido con 6-5 en el último parcial. Pero Jarry, que ingresó en el cuadro principal del torneo de la capital catalana como 'lucky loser', no se dio por vencido y se impuso en el juego decisivo.
El día fue prolífico para el tenis chileno con la victoria de Christian Garín (48º del mundo) por 7-5 y 6-4 ante el eslovaco Martin Klizan (47º).
Jarry se medirá por un puesto entre los ocho mejores con el ganador del duelo entre el español Fernando Verdasco (37º) y el búlgaro Grigor Dimitrov (43º). Garín, por su parte, espera al canadiense Denis Shapovalov (20º).
Horas antes, el español David Ferrer (155º) debutó con una victoria ante el alemán Mischa Zverev (96º), 6-3 y 6-1. Para Ferrer el de Barcelona es el penúltimo torneo de su sobresaliente carrera, que cerrará en un par de semanas en el Masters 1000 de Madrid.
El Torneo de Barcelona, también conocido como Trofeo Conde de Godó, se disputa sobre polvo de ladrillo y otorga 503.015 euros al ganador, y 253.000 euros al subcampeón. (EFE)
Tenis internacional: ¿se castiga más a las mujeres por protestar?
Serena Williams opina que fue castigada con mayor rigor tras sus desplantes en la final del Abierto de Estados Unidos, por el hecho de ser mujer. ¿Es cierto? Protestas ha habido muchas en este deporte. Multas también.
Imagen: picture-alliance/dpa/MediaPunch
No llovió ayuda desde las alturas
Su último recurso tampoco funcionó: Serena Williams trata de convencer al juez árbitro y a la supervisora del Abierto de Tenis de Estados Unidos, para revertir la decisión del juez de silla. Los gestos amables no conmovieron a los oidos sordos. Williams calificó de "ladrón" al juez de silla, a quien ademas acusó de sexismo. La tenista deberá pagar una multa de 17.000 dólares.
Imagen: picture-alliance/dpa/MediaPunch
Imágenes casi gemelas
También en la final del Abierto de Estados Unidos de 2009, Williams acudió al juez árbitro y a la supervisora del torneo, luego de que una jueza de línea fallara en su contra. Williams recibió una multa de 117.000 euros y permiso condicionado para jugar durante dos años.
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Gombert
El rey de los berrinches
John McEnroe no ha sido igualado en su propensión a protestar e insultar a los jueces. En 1990 se convirtió en el primer jugador descalificado del Abierto Australiano por injuriar a un juez. Estimar la suma de las multas que debió pagar el jugador estadounidense, es tarea casi imposible. En 1987, incluso fue suspendido dos meses por desplantes durante el Abierto de Estados Unidos.
Imagen: picture-alliance/dpa/H. Ossinger
Ánimo quebrado
A Marcos Baghdatos le costó "solo" 800 dólares su desplante de ira en el Abierto Australiano de 2012. En un cambio de lado, el chipriota rompió de puro coraje cuatro raquetas que costaron más que la propia infracción. Entonces, Serena Williams comentó el exabrupto de su colega: "Cuatro raquetas. ¡Impresionante!"
Imagen: picture-alliance/dpa/B. Walton
Ataque a la silla
En mayo de 2018, Karolina Pliskova perdió los estribos durante el Abierto de Roma. Aunque la jueza de línea no pudo demostrar una marcación contraria a la tenista, la sostuvo. Pliskova perdió y, al terminar el partido, le negó el saludo a la jueza. Además causó una horadación con su raqueta en la silla del juez. el desplante le costó miles de dólares.
Imagen: Getty Images/J. Finney
Beso de consuelo
De pena ajena. Justo en el torneo de Winbledon, al "caballero" Tim Henman le fallaron los modales. Un pelotazo lanzado por coraje fue a dar a la cabeza de una recogedora de pelotas. Henman fue descalificado del torneo: el primer jugador al cual le sucedió. Posteriormente, él se disculpó con la joven, a la que le dio un ramo de flores e, incluso, un beso.
Imagen: Getty Images/ALLSPORT/G. M. Prior
Bofetadas de la esposa
También en 1995, Jeff Tarango causa otro escándalo en Wimbledon: discute con jueces y el público, recoge sus cosas y se retira de la cancha. Su esposa Benedicte confronta al juez y le da dos cachetadas. La multa para su esposo: 63.000 dólares y suspensión de todos los torneos de Grand Slam. Luego, el castigo es reducido a 20.000 dólares y un año de suspensión en Wimbledon.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/J. Neilsen
La sangre es más cara que el agua
No hubo intención, pero las consecuencias fueron sangrientas. Por frustración, Daniel Nalbandian golpea la silla de un juez de línea. Una astilla hiere al juez. Nalbandian fue descalificado y debe pagar 70.000 euros de multa. El mismo año, el tenista rocía de agua a otro juez en el Abierto Australiano, por lo cual se ve obligado a pagar solo 8.000 dólares.
Imagen: picture-alliance/Actionplus
También en la Copa Davis
Iracundo, el joven tenista canadiense Denis Shapovalov lanzó una pelota que dio en plena cara del juez de silla. El ojo del árbitro se inflama de inmediato, y posteriormente debe ser operado. Shapovalov fue descalificado y Canadá sale de la Copa Davis. La multa es de 7.000 dólares.
Imagen: picture-alliance/empics/The Canadian Press/J. Tang
¿Arrogancia pura?
Muy exagerada fue la reacción de Alexander Zverev. Al ser eliminado de Wimbledon, insulta al juez de línea y es amonestado. "Solo quiere ser importante, lucirse por una vez en Wimbledon, para que alguien se acuerde de él aunque sea una vez", se burla el tenista. El juez es, en este caso, el mismo "amigo" de Serena Williams: Carlos Ramos.