Después de años de retraso, la Justicia mexicana investiga el escándalo de corrupción mundial con tentáculos que llegan hasta Alemania: el caso Odebrecht. Los críticos advierten contra tácticas electorales.
Publicidad
Después de años de retraso, la red de corrupción internacional que rodea a la empresa constructora brasileña Odebrecht ahora también está siendo investigada por la Justicia en México. Las investigaciones del nuevo gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador podrían poner al ex presidente Enrique Peña Nieto tras las rejas. Al menos si se confirma el testimonio del testigo clave Emilio Lozoya, quien en una primera audiencia el martes dijo que Peña Nieto y su ministro de finanzas Luis Videgaray, ambos del ahora opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI), le habían ordenado aceptar los sobornos pagados por la empresa brasileña.
El dinero, según la fiscalía, terminó en las arcas de la campaña del PRI y fue utilizado para comprar votos con el fin de obtener la mayoría calificada necesaria en el Congreso para aprobar la reforma energética. A cambio, Odebrecht recibía lucrativos contratos de la empresa petrolera estatal mexicana Pemex, cuyo director en ese momento era Lozoya. Según la fiscalía, Lozoya nombró cuatro testigos como prueba y presentó documentos y grabaciones de vídeo.
Acción policial en Alemania
Supuestamente se han malversado 500 millones de pesos (poco menos de 19 millones de euros) de esta manera. Algunos medios ya habían publicado pruebas del plan de corrupción hace años, pero las investigaciones se retrasaron repetidamente. El caso está levantando olas hasta en Alemania: el martes, un apartamento en Múnich y una casa en el lago Starnberg de la esposa alemana de Lozoya, Marielle Eckes, una heredera de la dinastía Granini, fueron registrados por las autoridades alemanes. Se cree que la pareja también tiene bienes ocultos en Suiza. En ambos países hay investigaciones por blanqueo de dinero.
Tras el cambio de gobierno en México, en diciembre de 2018, Lozoya se escondió en Europa. España lo entregó el mes pasado. Esto había sido precedido por negociaciones entre la oficina del fiscal mexicano y el ex empleado del Banco Interamericano de Desarrollo, que intercambió sus conocimientos por un generoso programa de indulgencia. Después de su llegada no fue enviado a la cárcel, sino que fue trasladado a un hospital y de allí a arresto domiciliario, donde, según los informes de prensa, organizó una gran fiesta.
Reacciones en México
Las reacciones en México fueron variadas. Los partidarios del gobierno celebraron la investigación como un gran paso para aclarar la corrupción sistemática del gobierno anterior. Los observadores independientes temen un circo judicial. En el periódico económico "Expansión", la experta en energía Miriam Grunstein sospechaba que el presidente López Obrador buscaba un pretexto para revertir la apertura del sector energético. "Tengo dudas de que el proceso sirva para combatir la corrupción o sea una señal de fortalecimiento del poder judicial", escribió. Los nombres mencionados hasta ahora son muy selectivos y apuntan a un acuerdo político.
El caso Lozoya sería una táctica para distraer de la recesión, el aumento de la delincuencia violenta y la mala gestión de la pandemia, que hasta ahora se ha cobrado casi 54.000 vidas en México, según sospecha el abogado y asesor político Oswaldo Ríos. Especialmente con vistas a las elecciones parciales del próximo año, López Obrador necesita urgentemente un tema atractivo de campaña electoral. Su popularidad es actualmente del 58%, pero la de su discutida alianza de campaña electoral Morena es significativamente menor. Luchar contra la corrupción y rescatar a la sobre endeudada petrolera estatal Pemex son las promesas más populares de López Obrador.
(gg/er)
Deutsche Welle es la emisora internacional de Alemania y produce periodismo independiente en 30 idiomas. Síganos enFacebook | Twitter | YouTube |
Lava Jato en Perú: hitos del terremoto político
Las revelaciones del exdirectivo de la constructora brasileña Odebrecht, en torno a la enorme trama de corrupción de Lava Jato, dejaron efectos nunca antes vistos, especialmente, en la política peruana. Aquí un resumen.
Imagen: picture-alliance/dpa/G. Isma
1. El destape
El miércoles 21 de diciembre de 2016, el brasileño Marcelo Odebrecht, exdirectivo de la constructora Odebrecht, se declaró culpable ante el Departamento de Justicia de Estados Unidos de haber entregado en sobornos aproximadamente 788 millones de dólares, para obtener licitaciones de obras públicas, a exfuncionarios de gobiernos de 12 países de Latinoamérica y África, entre ellos Perú.
Imagen: picture-alliance/dpa/H. Alves
2. Tres gobiernos salpicados
Odebrecht señaló que su empresa entregó en Perú 29 millones de dólares a candidatos presidenciales y funcionarios públicos con altos cargos entre 2005 y 2014, es decir durante las presidencias de Alejandro Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016). Mientras que en Brasil los implicados eran del izquierdista PT, en Perú eran de todas las tiendas políticas.
Imagen: picture-alliance/dpa/Wiegand
3. Fiscales populares
Al poco tiempo, la Fiscalía peruana formó el equipo especial Lava Jato, liderado por el fiscal coordinador Rafael Vela y el provincial José Domingo Pérez. Ambos ganaron fama rápidamente y se han posicionado entre las diez personas más poderosas del país, según una encuesta de Ipsos. Muchos comparan a Vela y Domingo con Sergio Moro, el juez brasileño que condenó a prisión al expresidente Lula.
Imagen: imago images/Agencia EFE/H. Alves
4. Barata y el acuerdo
La figura clave para obtener más información sobre Perú era el exjefe de la oficina de Odebrecht en Lima, Jorge Barata, quien junto a otros representantes y exdirectivos de la empresa firmó finalmente el 15 de febrero de 2019 un acuerdo de colaboración eficaz con la Fiscalía peruana para la entrega de pruebas. La empresa se comprometió también a pagar 180 millones de dólares al Estado peruano.
Imagen: Getty Images/AFP/N. Almeida
5. La Caja 2
Odebrecht y Barata revelaron que los pagos salieron de la denominada “Caja 2” que tenía la empresa. Esta fue una división creada por la constructora brasileña específicamente para el pago de sobornos y financiamiento no declarado a partidos políticos en los países en los que la empresa operaba. Muy pocas personas dentro de la empresa sabían de su existencia.
Imagen: Getty Images/AFP/N. Almeida
6. El primer pez gordo
El primer expresidente peruano en ser puesto en prisión preventiva por el caso fue Ollanta Humala junto a su esposa Nadine Heredia, en julio de 2017. Ambos pasaron nueve de los 18 meses impuestos tras la anulación de la prisión preventiva por parte del Tribunal Constitucional. Odebrecht contó que entregó a los Humala tres millones de dólares para la campaña de 2011. Dicho monto no fue declarado.
Imagen: Picture alliance/dpa/epa/E. Arias
7. Renuncia Kuczynski
Pedro Pablo Kuczynski renuncia a la presidencia el 21 de marzo de 2018, a raíz de las denuncias del partido fujimorista sobre una presunta compra de votos de legisladores para evitar su destitución por sus lazos con Odebrecht. PPK cumple prisión preventiva domiciliaria por presuntamente haber ayudado a Odebrecht a adjudicarse la construcción de la Interoceánica cuando fue ministro de Toledo.
Imagen: Reuters/C. Platiau
8. Fiscal contra fiscal
El 31 de diciembre de 2018, el fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, destituye a los fiscales de Lava Jato. Chávarry, investigado por presuntos vínculos con una red de corrupción y con el fujimorismo, argumentó que Vela y Domingo vulneraron el principio de jerarquía tras haber cuestionado su permanencia en el cargo. Tras presión ciudadana, los fiscales fueron restituidos y Chavarry renunció.
Imagen: picture-alliance/ZumaPress/H. Perez
9. García se suicida
Uno de los hechos más trágicos ocurrió el 17 de abril de 2019, cuando el expresidente Alan García se disparó en la cabeza momentos después de ser intervenido por la Policía. Su situación se había complicado después que su exsecretario personal, Luis Nava, y Barata, confirmaron que este recibió cuatro millones de dólares de Odebrecht para lograr el contrato de la Línea 1 del Metro de Lima.
Imagen: picture-alliance/dpa/V. Tarqui
10. Toledo, a la espera de su extradición
El expresidente Alejandro Toledo fue arrestado el 16 de julio de 2019 como parte del pedido de extradición de Perú por presunto delito de corrupción y lavado de activos. Según Barata, Toledo recibió en coimas más de 30 millones de dólares por la licitación de dos tramos de la carretera Interoceánica. Su amigo, el empresario israelí Josef Maiman, confirmó a la Fiscalía que actuó como testaferro.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/M. Altaffer
11. Keiko Fujimori libre
Las investigaciones también alcanzaron a la excandidata presidencial Keiko Fujimori, quien en noviembre pasado dejó la prisión tras más de 13 meses. En un primer fallo, Fujimori había recibido 36 meses de prisión preventiva, sindicada por Barata de haber aceptado más de un millón de dólares para su campaña de 2011 y por tratar de obstruir las investigaciones con su mayoría en el Parlamento.
Imagen: REUTERS
12. Investigaciones no avanzan
Otra decena de exautoridades se han visto involucradas en la trama Lava Jato, como los dos últimos alcaldes de Lima, Susana Villarán (en la foto) y Luis Castañeda, quienes son investigados por presuntas irregularidades en los proyectos Línea Amarilla y Rutas de Lima. Villarán está recluida en prisión preventiva. Sin embargo, hasta ahora solo hay un sentenciado y dos acusados por el caso en Perú.
Imagen: Getty Images/AFP/E. Benavides
Regresa a prisión
La justicia peruana ordenó el 28 de enero (2020) que Keiko Fujimori vuelva a prisión preventiva por un plazo de 15 meses, al acoger una petición de la Fiscalía. La juez dijo que Fujimori estaría involucrada en el delito de lavado de activos cuando fue legisladora y cuando habría intentado ser la más importante funcionaria de la nación, en las campañas electorales de 2006 y 2011.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/M. Mejia
La contrademanda de Odebrecht
La empresa brasileña demandó el 5 de febrero (2020) por 1.200 millones de dólares al Estado peruano ante el tribunal arbitral del Banco Mundial por la cancelación del contrato de concesión del Gasoducto Sur Peruano. La constructora anunció haber acudido al CIADI, con sede en Washington, en busca de una indemnización para "preservar sus legítimos derechos" porque Lima "violó sus obligaciones".
Imagen: picture-alliance/dpa/G. Isma
Otro exalcalde limeño
El 14 de febrero (2020) fue enviado a prisión preventiva, por 24 meses, el exalcalde de Lima, Luis Castañeda. Éste es el segundo exalcalde limeño enviado a prisión en este escándalo de corrupción. Castañeda es acusado de haber recibido ilegalmente 480.000 dólares de la constructora OAS para su campaña a la alcaldía en 2014 y otros 150.000 dólares de Odebrecht.