Tillerson señala posible endurecimiento de política con Cuba
14 de junio de 2017
El ex presidente de EE. UU., Barack Obama, restableció en 2015 las relaciones diplomáticas entre ambos Gobiernos tras más de 50 años de ruptura y suavizó el embargo al no poder levantarlo por la oposición en el Congreso.
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En medio de los crecientes rumores que apuntan a que Donald Trump anunciará el próximo viernes en Miami un cambio en la política de acercamiento a Cuba llevada a cabo por Barack Obama, el secretario de Estado, Rex Tillerson, dio hoy (13.06.2017) señales del posible endurecimiento de la posición estadounidense.
Estados Unidos debe recuperar el espíritu de la ley Helms Burton, que en 1996 intensificó el embargo a la isla, para presionar a Cuba en materia de Derechos Humanos, dijo el jefe de la diplomacia norteamericana en el comité de Relaciones Exteriores del Senado.
Poco despúes reiteró la idea ante el Subcomité de Asignaciones. "Creemos que es importante que demos pasos para restaurar el propósito de la legislación Helms Burton, que era presionar al régimen para cambiar, y esa presión, según nuestro punto de vista, se ha levantado ampliamente", dijo Tillerson.
En los últimos días, los ánimos se han alterado en Washington ante lo que muchos consideran un inminente anuncio de Trump sobre un giro en la política de acercamiento a la isla que desarrolló su antecesor.
Revertir el acercamiento, promesa de campaña
El demócrata Barack Obama restableció en 2015 las relaciones diplomáticas entre los dos Gobiernos tras más de 50 años de ruptura y suavizó el embargo al no poder levantarlo por la oposición en el Congreso.
Desde que Trump entró en la Casa Blanca en enero, la política hacia Cuba está en revisión . El mandatario, que al inicio de la carrera por la nominación del Partido Republicano había llegado incluso a mostrarse favorable al levantamiento del embargo, prometió en la recta final de la campaña a la línea dura del exilio cubano en Miami que revertiría el acercamiento de Obama si llegaba a la presidencia.
No hay confirmación oficial de que Trump vaya a anunciar cambios en Miami y aunque alguno de los senadores que hoy preguntaron a Tillerson en la audiencia del comité de Relaciones Exteriores lo daba por sentado, este solo confirmó que la política sigue en revisión.
CT (dpa, EFE)
Estados Unidos y Cuba: crónica del antagonismo
Desde el triunfo de la revolución cubana, Cuba y Estados Unidos libraron una pugna que tuvo su momento más álgido en la crisis de los misiles.
Imagen: picture-alliance/dpa
"El burdel de EE.UU."
Antes de la revolución, Cuba era para muchos estadounidenses sinónimo de casinos, bares y clubes nocturnos. En la foto, una cena en el Club de Yates de La Habana. Cuba era "el burdel de EE.UU.", dice el politólogo Karl E. Meyer. Para la población, la dictadura de Fulgencio Batista representaba, en cambio, sobre todo pobreza, desempleo y estancamiento.
Para derribar al régimen en bancarrota, a Fidel Castro (en el jeep) le bastó una guerrilla de algunos centenares de combatientes. El 1 de enero de 1959, Batista huyó y los rebeldes tomaron La Habana. Estados Unidos impuso sanciones contra Cuba, que se fueron endureciendo en los años siguientes. Los dirigentes cubanos se volcaron entonces hacia la Unión Soviética.
Imagen: picture-alliance/dpa
Bahía Cochinos
Un grupo de cubanos en el exilio intentó derrocar a Fidel Castro en 1961, con ayuda de la CIA. La operación fue un fiasco. El ejército revolucionario desbarató la invasión en Bahía Cochinos en el curso de tres días y tomó más de 1.000 prisioneros.
Imagen: AFP/Getty Images/M. Vinas
Al borde del desastre
Gracias a la confrontación cubano-estadounidense, la Unión Soviética dispuso de pronto de una suerte de base a solo 90 millas de Estados Unidos. El Kremlin quiso estacionar allí misiles, con lo que se desató una crisis que llevó al mundo al borde de una guerra nuclear en 1962. Con un bloqueo naval, Washington se impuso y forzó la retirada de los misiles.
Imagen: picture-alliance/dpa
Salud y educación
La Unión Soviética estaba dispuesta a pagar generosamente por su aliado. Durante décadas subvencionó a la isla, entre otras cosas con petróleo, que Cuba reexportaba para conseguir divisas. Cuba consiguió así erigir un sistema de salud y educación ejemplar.
Imagen: picture-alliance/dpa
El éxodo de los marielitos
En 1980, Fidel Castro dejó salir de la isla a quienes quisieran partir hacia Estados Unidos, desde el puerto de Mariel. Cerca de 125.000 cubanos llegaron a Florida. Entre ellos se contaban algunas personas que las autoridades habían dejado salir de cárceles e instituciones psiquiátricas.
Imagen: picture-alliance/Zuma Press/T. Chapman
Economía dependiente
El embargo estadounidense constriñó durante décadas la economía cubana. Además, no se llevó a cabo una diversificación. Después de la revolución, la caña de azúcar siguió siendo el principal producto de exportación de la isla. Cuba dependía en extremo de la ayuda de la Unión Soviética, lo que quedó de manifiesto palmariamente en 1990.
Imagen: AFP/Getty Images/N. Barroso
"Período especial"
Con el colapso de la Unión Soviética se desmoronó también la economía cubana. Cuando cesó la ayuda del Este, la escasez comenzó a imperar en la isla. Fidel Castro proclamó en 1990 el "Período especial". Debido a la falta de gasolina y de repuestos para los automóviles, volvieron a verse algunas carretas de bueyes. Desde fines de la década del 90, Venezuela suministra petróleo barato a Cuba.
Imagen: AFP/Getty Images/A. Roque
Política de sanciones
Desde 1993, la Asamblea General de la ONU exhorta cada año a Estados Unidos a poner fin al embargo contra Cuba. Washington endurece o suaviza sus términos de tanto en tanto. En 2004, el presidente estadounidense George W. Bush (a quien la foto muestra en un afiche en La Habana) endureció una vez más las sanciones.
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¿Nuevo capítulo?
Estados Unidos y Cuba se disponen a iniciar ahora un nuevo capítulo. Se prevé abrir de nuevo una embajada estadounidense en La Habana y algunas restricciones a los viajes y al comercio han de suavizarse. El presidente de Cuba, Raúl Castro (en la TV) hizo el anuncio al mismo tiempo que el presidente estadounidense, Barack Obama.