Tiene 25 años y defiende la camiseta verde-naranja de uno de los equipos más grandes de la Bundesliga. Ha recibido varias ofertas para dejar el Bremen, pero de momento parece que el medio campo no tiene intención de abandonar a los norteños. Su gran ventaja para ganarse la convocatoria en este Mundial ha sido el trabajo empleado en mejorar:

Borowski ha tomado buena nota de los consejos del entrenador nacional, Jürgen Klinsmann, y su desarrollo se hace evidente sobre el terreno de juego. También en la Bundesliga se ha hecho un hueco en el Bremen para consolidarse como un jugador habitual en la alineación de su equipo.

Mejorando hasta Ballack

"Uno se siente de alguna manera honrado cuando es comparado con Ballack", dice Borowski, "pero creo que la comparación es un poco exagerada. Michael es uno de los jugadores más completos del mundo. A mí aún me falta".

Sin embargo, el mundo del fútbol alemán coincide en que Borowski va por el buen camino, y en que si logra sostener el ritmo que lo empuja hacia delante, conseguirá situarse también entre los grandes, junto a Ballack.

Borowski se está especializando en la principal de las características que definen a un medio campo: los buenos pases. Y marcar un gol de vez en cuando para mantener contenta a la afición. En 2004 ya contribuyó decisivamente con sus dos tantos a que el Bremen se hiciera con la Copa alemana.

A la espera del Mundial

El 21 de agosto de 2002 contra Bulgaria en Sofia debutó Borowski en la selección alemana. El encuentro finalizó con un 2-2. Además, el jugador del Werder Bremen fue uno de los fijos en el equipo alemán durante la Copa Confederaciones del pasado verano y no ha dejado pasar una oportunidad de demostrarle al seleccionador nacional que quiere ser parte de su once. "Estoy absolutamente satisfecho con el desarrollo de Borowski. Ha mejorado claramente, se le ve más sobre el campo, se ofrece más…", opinó de él Klinsmann.

Según el jugador, el partido que enfrentó al combinado alemán con Turquía fue para él decisivo. Después de saltar al terreno de juego en el minuto 74, Borowski construyó el pase que habría de acabar en el gol del 2-2, salvando a Alemania de una derrota bochornosa. Borowski tiene seguro más balones preparados para sacar de apuros a su equipo, Klinsmann decidirá si los pone en juego en el próximo Mundial.

Títulos:

- Campeón juvenil de Alemania: 1999, con el juvenil del Bremen.

- Campeón de la Bundesliga: 2004.

- Campeón de la Copa de Alemania: 2004.