"Tocando sueños“ es el nombre de la primera gira europea que acaba de comenzar la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil (OSNJ) de Chile Y con ella sus 74 integrantes, jóvenes de entre 18 y 24 años, alcanzan uno de sus mayores anhelos: tocar en la cuna de la música clásica.

Durante dos semanas y media harán un intenso recorrido por Alemania, Austria, Eslovaquia y República Checa. Se presentarán en escenarios de siete ciudades, cuatro de ellas alemanas -Bremen, Berlín, Colonia y Múnich- y luego viajarán a Viena, Bratislava y Praga, para regresar a Chile el próximo 8 de octubre.

Para hacer realidad el viaje de Santiago a Europa, la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles –entidad estatal a la que pertenece la OSNJ- debió trabajar durante dos años en la organización, búsqueda de auspicios y apoyos en la esfera pública y privada.

La meta era clara, cuenta el director de la orquesta, José Luis Domínguez: “Ellos están tocando muy bien, ya son parte de todas las temporadas internacionales de música en Chile. El nivel de la OSNJ requería de una gira internacional”.

Dos toneladas y media de instrumentos y equipos partieron primero en un avión de carga. Luego siguieron los jóvenes, organizadores y autoridades, a los que se sumará en Múnich Cecilia Morel, Primera Dama chilena y presidenta de esta Fundación de Orquestas del país sudamericano.

Música y desarrollo

A sus 20 años, el fagotista Alejandro Vera nunca imaginó que llegaría a presentarse en Europa. “La música es para mí una forma de vivir, algo que me completa. Y la oportunidad de salir del país, que te paguen todo y tocar en estos escenarios, es algo muy grande”, indica desde una sala de ensayos en Bremen.

Alejandro comenzó a estudiar fagot a los 12 años, gracias a un visionario proyecto de orquesta de su escuela, en el humilde barrio de La Pintana, Santiago. Como él, la gran mayoría de los jóvenes músicos de la OSNJ proviene de familias de bajos ingresos y mucho esfuerzo, a veces también de sectores estigmatizados por la delincuencia y el tráfico de drogas.

“A través de estas orquestas, muchas familias y la sociedad están cambiando. Todos estos jóvenes tienen condiciones para dedicarse profesionalmente a la música en el futuro y, además, la cultura es el motor del desarrollo social de un país”, señala Domínguez.

Tocando junto a los grandes

Alemania es el país donde darán más conciertos. Aquí también harán un recorrido cultural relacionado con uno de los nombres clave en la gira: Ludwig van Beethoven. Precisamante en Bremen comenzaron esta gira con un workshop con los músicos de la Deutsche Kammerphilharmonie, prestigiosa orquesta que se ha distinguido por sus interpretaciones del célebre compositor.

La agrupación tiene también un proyecto conjunto con una escuela secundaria de Bremen, por lo que el trabajo con jóvenes –en un sector con alumnos de diversas nacionalidades y también problemas sociales- no le es extraño. Por eso celebran esta gira de jóvenes talentos chilenos. “Nos parece fantástico, por eso los invitamos y ensayamos con ellos. No sólo hay que apoyar a los jóvenes aquí en Alemania, sino en todos los sitios. Se sabe que la música es muy importante, y la cultura es quizás la cosa más pacificadora que hay”, indica Rodrigo Blumenstock, oboísta de esta orquesta de Bremen.

Beethoven con sello chileno

En medio del repertorio escogido para la gira –en su mayoría de autores latinoamericanos-, destaca la Séptima Sinfonía de Beethoven, que se ha convertido en un significativo proyecto para estos jóvenes. “Quisimos levantar la vara y tocar en estas ciudades su música desde nuestro humilde y esforzado punto de vista. Es una lectura muy fiel de Beethoven, pero con un sello chileno y muy de ellos. Nadie toca como estos muchachos”, cuenta con orgullo José Luis Domínguez.

El director de la OSNJ recoge la palabras de Richard Wagner: “Él se refirió a la VII Sinfonía de Beethoven como la apoteosis de la danza, y nosotros la insertamos en el repertorio latinoamericano, que es todo danza”.

A pesar de su juventud –o quizás debido a ella- estos músicos están tocando sus sueños: “Tienen un sentido de la disciplina, una pasión, energía, vitalidad e inocencia, que te dan una interpretacion inolvidable”, confirma su director.

Autora: Victoria Dannemann

Editora: Cristina Papaleo