La Feria del Juguete de Núremberg cerró una vez más sus puertas con un balance positivo, a pesar de tanta crisis. La balanza de pedidos ha crecido informan fuentes de la Asociación de Jugueteros Alemanes y, a pesar de que con sus 76.000 visitantes ha habido cuatro mil menos que en el año anterior, la calidad de los presentes ha marcado la diferencia: han sido más bien las altas esferas empresariales las que han acudido. Durante esta especial edición jubilar, el despliegue de los 2689 expositores ha sido espectacular y ha puesto de manifiesto lo que en el mundo lúdico ha cambiado.

Muñecas y automóviles

Ciertas preferencias básicas no cambian, es cierto. Así por ejemplo, en la categoría Emoción y Experiencia ganó Little Sunshine, una clásica muñequita rubia de vestido rosa, pero que, con su cuerpo rebosante de electrónica, reacciona al tacto y pide de comer. Y en Idea y Juego ganó, escogido por los niños, una autopista con dos autitos: Carrera Wars. Sin embargo, claro queda que la virtualidad gana terreno y es el amo del mundo lúdico.

Para muestra un botón: con su Penner Game –el mundo virtual de un harapiento que vive en la calle-, dos muchachos alemanes de 19 años han conseguido ubicarse entre los 100 más populares juegos a nivel internacional y, entre octubre y diciembre del año anterior, crear una comunidad de un millón de participantes activos.

Sólo dos segmentos

Otro factor se manifiesta determinante entre las 70.000 novedades presentadas en los hangares de Núremberg: los segmentos se polarizan; por un lado hay una exigencia masiva de precios bajos y por otro, un segmento bastante caro. En el centro, hay poco. Peter Wippermann, especialista en diseño de la comunicación, califica estos dos segmentos del mercado de crash y luxus. En el segmento crash, sin embargo, “hay que tener cuidado”, advierte Wipermann, “este mercado dominado en un 80% por la China tendrá, forzosamente, después de los escándalos –también de los alimentos- que subir de calidad. Y el precio también subirá”. Es decir, el futuro del juguete no ostenta necesariamente el calificativo barato. Virtual, sí.

No todos en aprietos: ¡Siga leyendo!

“El ramo del juguete se desarrolló en 2008 como una novela policíaca”, opinó por su parte Werner Lenzner, un director de Eurotoys. La semana de Navidad sorprendió a todos con su récord de ventas: en un 0,9% habría subido el volumen total en Alemania; España, Bélgica, Portugal, Italia y Austria acusan un desarrollo igual de positivo. Curiosamente, desde la Selva Negra, Märklin -la constructura de trenes a escala cuyas vías atraviesan las salas de los hogares desde hace 160 años- en diciembre acusaba también un repunte en sus ventas. A pesar de ello, puntualmente para la Feria del Juguete, se declaró insolvente. Errores en la gerencia y altos costos de personal aducen. Sin embargo, desde hacía tiempo los aprietos provenían del Asia. Lo mismo que para Herpa, -creadora de los modelos en miniatura que acompañan a los trenes; las predicciones para su futuro cercano no excluyen la insolvencia.

Dos clásicos sobreviven y muy bien

Como fuere y a pesar de crisis y malas noticias -y de que los expertos no se cansan de afirmar que los niños de hoy prefieren ver lo autos y los trenes por Internet- durante el encuentro en Núremberg, el optimismo parece haber reinado. Tanto es así que Märklin y Herpa no pierden la esperanza de un repunte y Ravensburg afirma que sus rompecabezas y juegos de mesa, a pesar de la recesión, siguen siendo un negocio estable. Razón para la alegría no le falta: su caja de experimentos ScienceX se hizo con el premio Toyinnovation 2009.

¿Y cómo se ve en la era de la virtualidad la motricidad más clásica? Faber Castell -fabricante de lápices desde 1761que mantiene su línea de colores en bellas y delgadas cajitas metálicas- no piensa descuidar la importancia del desarrollo de la motricidad en los niños. Su apuesta cae en la fusión de utensilios escolares y juguetes.

Los juguetes de la China

Las cifras son buenas y el ánimo no está bajo en el ramo del juguete, también en la China. Ésta se ha visto obligada a cambiar de prácticas para cumplir con los estándares impuestos por la Unión Europea. “El nivel del ramo del juguete era muy bajo en China”, explica un representante de una empresa asiática, “se produjo muchos juguetes malos y peligroso. Esto hizo daño al mercado y a los niños. Con las nuevas directivas tenemos que optimizar nuestros procesos de producción. Las empresas buenas lo lograrán y crecerán, las malas se hundirán”.

Por lo pronto, mucho parece indicar que en la China nadie se ha hundido, ni siquiera Mattel que se vio obligada en 2007 a retirar del mercado unos 20 millones de muñecas y automóviles fabricados en ese país. Es decir, ¿será real la visión de que la gran mayoría de los juguetes del futuro podrá ostentar aparte de virtual el calificativo de seguro? Quizás. Lo que sí es seguro es que aunque las empresas con tradición como Märklin o Herpa encontrasen su camino para sobrevivir dignamente en el segmento de lujo, el futuro del ramo del juguete –virtual o no- está escrito en chino.