La primera pregunta que los aficionados se hacen cuando quieren ir a acompañar a su equipo en un partido importante es ¿dónde conseguimos las entradas? Claro, cuando se vive en la misma ciudad basta con ir a comprar los billetes en las taquillas del estadio. La situación se complica un poco cuando los hinchas residen en otro país, a más de 2.000 kilómetros de distancia de la sede del juego.

Eso es lo que acontece con los miembros de la Peña Atlética Centuria Germana (PACG), el club que reúne a los seguidores del Atlético de Madrid en Alemania, cuyos integrantes quieren apoyar en vivo al equipo que dirige Diego Simeone en su enfrentamiento crucial contra el Bayern en la semifinal de la Champions League.

Un amor costoso

Al partido en Madrid se desplazarán 15 miembros de la peña. En Múnich serán 60 de ellos los que estarán en la tribuna. Asistir a los estadios Vicente Calderón y Allianz Arena tiene su precio. El grupo se gastará en esta semifinal de la Champions League poco más de 40.000 euros.

El amor al Atlético demanda la inversión de una pequeña fortuna. En promedio los costos del viaje a Madrid, incluida la entrada al estadio, los vuelos, la alimentación y el hospedaje, oscila en 800 euros por persona. Múnich no es mucho más económico. Allí, en la capital bávara, cada aficionado necesitará unos 500 euros para cubrir sus costos.

Lo más caro, y complicado de obtener, es sin duda el billete de ingreso al estadio. En Madrid la Peña Atlética Centuria Germana pagó por cada una de las entradas que recibió del club 135 euros. En Múnich solo 70 euros, aunque en lugares menos atractivos porque se sentarán en la tribuna de la visita, que está ubicada muy alto en una esquina del Allianz Arena.

“En todos lados el fútbol tiene más de negocio que de romanticismo, eso hay que aceptarlo”, comenta esa situación André Kahle, presidente de PACG, quien también apunta que el hecho de que solo se venda entradas a socios activos del Atlético de Madrid no facilita el deseo de acompañar al equipo en el estadio. “Entendemos esa política del club, es cuestión de seguridad y además todos podemos adquirir una membrecía. Aún así, muchos hinchas alemanes del equipo se quedan al margen de una experiencia tan excepcional como una semifinal de la Champions League contra el Bayern debido a esa norma”.

Puente de comunicación

Los “colchoneros alemanes” tendrán en Múnich un papel muy especial. Antes, durante y después del partido contra el Bayern asumiran la función de anfitriones. Para ello asistirán a la reunión de coordinación de la policía y los representantes del club campeón de la Bundesliga con las distintas barras de aficionados presentes en el Allianz Arena. PACG transmitirá luego las recomendaciones logísticas y de comportamiento a sus colegas de todo el mundo.

“Los hinchas que vienen directamente de España quizás no necesitarán demasiada coperación pues vienen muy bien organizados. Otra cosa es lo que sucede con las peñas de seguidores del Atlético de Madrid alrededor del mundo”, cuenta Kahle. Desde Bélgica, Holanda, Italia y otros países europeos llegarán a Múnich cientos de “colchoneros” a quienes sus colegas alemanes suministrarán informaciones importantes y ayudarán en cuanto puedan necesitar al entrar, asistir, y abandonar el estadio.

“Nosotros no somos el Atlético de Madrid, pero en nuestro país estamos para ayudarle a los visitantes con los que compartimos el amor a un equipo. Nosotros hacemos mucho por el club sin que ellos lo noten, pero también recibimos muchas cosas de su parte. Por ejemplo la alegría de estar en una semifinal de la Champions League”, sostiene el presidente de PACG.

Los hinchas alemanes del Atlético de Madrid pronostican un resultado apretado en ambos partidos de la semifinal, y su único deseo es que los árbitros no sean protagonistas. La consigna de la Peña Atlética Centuria Germana es “que gane el mejor sin ayuda del pito”.