El Tribunal Penal Internacional para ex Yugoslavia insiste que el excomandante serbobosnio Ratko Mladic fue la "figura central" y la "máxima autoridad" militar responsable del genocidio cometido en la guerra de Bosnia.
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Mladic "tomó todas las decisiones militares que hicieron falta" para llevar a cabo "una campaña de limpieza étnica" de los musulmanes durante esos años (1992-1995), según el fiscal Arthur Traldi del Tribunal Penal Internacional para la ex-Yugoslavia (TPIY) . "Él estaba a cargo de todas las decisiones y es quien tuvo siempre la última palabra", añadió, y lamentó que Mladic "se jactaba delante de los soldados" de las atrocidades que cometía, una afirmación que le costó al fiscal una llamada de atención de los jueces.
El letrado acusó a Mladic de "amenazar a todos los soldados" del país para que obedecieran sus órdenes "si querían seguir con vida", aludiendo a una grabación con ese contenido hecha en 1995. Traldi lo definió como "el comandante y jefe" de los soldados y los civiles vestidos de militares que actuaron durante la guerra y aseguró que tenía un "control importante y total" para presionar "hasta a sus más fieles aliados".
Objetivo de operación militar era la "limpieza étnica”
El acusado, de 74 años, ha negado los once cargos -genocidio, crímenes de guerra y de lesa humanidad- que se le imputan por sus actuaciones y decisiones durante el conflicto, que dejó unos 100.000 muertos. Las pruebas, dijo el fiscal Alan Tieger, señalan que "la limpieza étnica no fue una consecuencia de la campaña militar, sino su único objetivo". Mladic hizo "todo lo posible" para que la vida de los musulmanes en Bosnia fuera "insoportable", aseveró.
El excomandante serbobosnio está acusado de ser el principal culpable del asedio, los bombardeos y los ataques a los que estuvo sometida Sarajevo, la capital de Bosnia, que desembocaron en el asesinato de 10.000 personas. "Mladic no quería evitar que los musulmanes pudieran crear un Estado, él quería que desaparecieran por completo", agregó Tieger.
Asimismo, señaló que Mladic tuvo un papel "central" en la masacre que se cobró la vida de 8.000 varones musulmanes en Srebrenica en 1995, muchos fusilados por sus fuerzas en un campamento de la ONU. Sobre esa masacre, añadió que Mladic prometió "devolver la ciudad al pueblo serbio" y pocos días después "miles de hombres y niños, niños de 12 años, fueron asesinados de forma sistemática".
JOV (efe, L'Express)
La intervención de la OTAN contra Serbia
El bombardeo de Serbia por parte de la OTAN terminó con la violencia de las tropas serbias contra los albano-kosovares. Sin embargo, esa guerra, que se realizó sin el mandato de la ONU, sigue siendo controvertida.
Imagen: picture-alliance/dpa
Huellas de la guerra
El conflicto en Kosovo escaló a fines de 1990. Decenas de miles de personas huyeron y, cuando todas las tentativas de restablecer la paz se vieron frustradas, la OTAN inició un ataque aéreo a las bases y objetivos militares serbios, el 24 de marzo de 1999. Once semanas después, Slobodan Milosevic se rendía.
Imagen: Eric Feferberg/AFP/GettyImages
El fracaso de la resistencia pacífica
Ya a mediados de los 80 comenzaron en Kosovo las protestas contra los intentos de Belgrado de recortar los derechos de la población albana. En los 90, las represalias aumentaron. Ibrahim Rugova, que lideraba el movimiento político en Kosovo desde 1989, creía en la resistencia pacífica y trató de convencer a Slobodan Milosevic de un cambio de rumbo, pero sin éxito.
Imagen: picture-alliance/dpa
Guerra de guerrillas
En Kosovo comienza a formarse la resistencia armada. La autoproclamada Armada de Liberación UCK empieza una cruel guerra de guerrillas perpetrando violentos ataques contra los serbios, pero también contra los albanos, a quienes considera colaboradores. Serbia responde a los actos terroristas incendiando viviendas y saqueando tiendas. Cientos de miles personas huyen.
Imagen: picture-alliance/dpa
Expulsión sistemática
La guerra se vuelve cada vez más brutal. Para romper la resistencia de la UCK y el apoyo que le brinda la población, las fuerzas serbias atacan cada vez más a civiles. Muchas personas huyen a los bosques. Miles de kosovares son llevados en trenes y camiones a las fronteras del país, sin documentos que probaran que provenían de Kosovo.
Imagen: picture-alliance/dpa
El último intento
En febrero de 1999, EE. UU., Francia, Gran Bretaña, Rusia y Alemania llaman a las partes en conflicto a una conferencia en Rambouillet para lograr un acuerdo limitado de autonomía para Kosovo. Los representantes kosovares aceptan, pero los serbios no están dispuestos a hacer concesiones, y las negociaciones fracasan.
Imagen: picture-alliance/dpa
"Intervención humanitaria"
El 24 de marzo de 1999, la OTAN comienza a bombardear objetivos militares y estratégicos en Serbia y Kosovo para frenar la violencia contra los albanos. También Alemania participa en los ataques. La operación “Allied Force” es la primera guerra de la OTAN en 50 años que no cuenta con el respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU. Rusia juzga severamente la intervención
Imagen: U.S. Navy/Getty Images
Infraestructura paralizada
Además de los ataques a instalaciones militares, la OTAN también toma como objetivo vías de abastecimiento, líneas de ferrocarril y puentes. En 79 días y noches arriban más de 37.000 misiones de la alianza, y cerca de 20.000 misiles y bombas caen sobre territorio serbio. Muchos civiles pierden la vida. “Daños colaterales”, según el lenguaje que utiliza la OTAN.
Imagen: picture-alliance/dpa
Nubes tóxicas sobre Pancevo
También son atacadas las fábricas, como en Pancevo, cerca de Belgrado. Allí, las bombas de la OTAN destruyen un depósito de químicos y una fábrica de fertilizantes liberando grandes cantidades de sustancias químicas que contaminan suelos, ríos y el aire. Las consecuencias para la población son gravísimas. Serbia acusa a la OTAN de utilizar munición enriquecida con uranio, así como bombas racimo.
Imagen: picture-alliance/dpa
Guerra contra la propaganda de guerra
Para privar a Milosevic de un importante órgano de propaganda, la OTAN ataca la televisión estatal en Belgrado. Aunque se informó con anticipación al Gobierno serbio del ataque, éste no difunde la información. En el edificio de la emisora mueren 16 personas.
Imagen: picture-alliance/dpa
"Daños colaterales"
En Kosovo, las bombas de la OTAN caen por error sobre una caravana de refugiados albanos. Mueren cerca de 80 personas. La OTAN califica, además, de “daño colateral” el bombardeo de la embajada china en Belgrado, en el cual mueren cuatro personas. El incidente provoca una grave crisis diplomática entre Pekín y Washington.
Imagen: Joel Robine/AFP/GettyImages
Balance del horror
A comienzos de junio llegan las primeras señales de Belgrado que indican que Slobodan Milosevic está dispuesto a ceder. El 19 de junio la OTAN detiene los ataques aéreos. El balance de la guerra: miles de muertos y 860.000 refugiados. La economía serbia está por los suelos, y amplios sectores de su infraestructura están destruidos. Kosovo es puesta bajo administración de la ONU.