Tras haber actividad sísmica, emerge vapor a través de una grieta. Y estas fisuras se han observado por toda la ciudad de Grindavik, en el suroeste de Islandia. La tierra ha estado temblando durante días, causando importantes daños en tuberías y carreteras. Bajo estas grietas se desplaza el magma a su paso hacia el Atlántico.

Un equipo de geólogos de la Universidad de Islandia ha instalado numerosos sismógrafos. Tras más de 1.400 seísmos en la región de Grindavík en las últimas 48 horas, los expertos advierten de una muy probable erupción volcánica en los próximos días. En los últimos años se han producido repetidas erupciones volcánicas en Islandia. La más reciente, en julio de 2023, en el monte Litli-Hrútur.

Una vista aérea de los baños termales conocidos como la Laguna Azul (Bláa Lónið). Tras una serie de terremotos y una posible erupción volcánica, una de las mayores atracciones turísticas de Islandia permanece cerrada por el momento.

Un residente de la localidad de Grindavik carga sus pertenencias en su coche después de que las autoridades le permitieran volver a su casa el lunes, pese a la incertidumbre de no saber cuándo sería realmente la erupción. "Podría ocurrir en las próximas horas, o en unos días", declaró el investigador Thorvaldur Thordarson a la emisora islandesa RÚV.

La carretera principal sólo tiene una dirección y es alejarse de Grindavik. Los geólogos temen que la erupción sea peor que la de la isla de Heimaey en 1973, cuando 100 metros cúbicos de lava por segundo salieron disparados de una fisura de tres kilómetros de largo en la tierra. "Una erupción en Grindavik sería una catástrofe", declaró a RÚV el geólogo Ármann Höskuldsson.

Un miembro de los servicios de emergencia observa la situación en las carreteras. Los investigadores sospechan que el túnel de magma del Atlántico está en erupción. Esto podría tener consecuencias de gran alcance. La erupción sería la llamada eyección, una erupción explosiva en la que escapan principalmente rocas y cenizas. Se formaría una gran nube de humo, la cual podría llegar hasta Europa.

El suelo se ha agrietado en varios lugares de Grindavik y sus alrededores. Según los geólogos, las grietas se encuentran por encima del túnel de magma. Pero los sismos han ido disminuyendo gradualmente desde la noche, lo que podría indicar que el túnel de magma ya no esté muy por debajo de la superficie.

En una propiedad de Grindavík se han colocado carteles en los que se lee "Tómt", que significa "vacío". El Ministerio de Defensa islandés declaró que el martes se tomaría una decisión sobre el regreso temporal a la ciudad. Solo habrá que esperar a ver cómo evolucionan los acontecimientos.