Otros tres soldados alemanes y 12 civiles resultaron heridos. Dos de los efectivos alemanes ya fueron operados y será trasladados rápidamente a Alemania.

Se trata del más severo atentado contra la Bundeswehr (FF. AA. Alemanas) desde hace cuatro años. En junio de 2003 habían muerto cuatro soldados alemanes y 29 había resultado heridos al ser atacado por un comando suicida un autobús en que viajaban.

Actualmente se encuentran estacionados en Afganistán casi 3.200 efectivos militares alemanes. Además operan en el sur de Afganistán seis aviones alemanes Tornado de reconocimiento.

Recrudecimiento de la violencia

El subsecretario de Estado alemán Peter Wichert se halla en el norte de Afganistán, donde están estacionadas las tropas alemanas, visitando a las unidades afectadas, según informó el ministerio de Defensa. Las unidades alemanas realizan sobre todo actividades de asistencia humanitaria y reconstrucción.

Los soldados se trasladaban en parte a pie y en parte en un vehículo, según las autoridades afganas. Un testigo ocular manifestó que de pronto escuchó una explosión y vio un humo espeso y seres humanos que corrían.

El jueves, explosiones de bombas en el camino provocaron la muerte de 11 agentes de la policía afgana y el ministro de Información de Afganistán resultó herido en un ataque suicida que también se atribuyó a los talibanes.

¿Venganza por la muerte de Dadulá?

La semana pasada, tropas estadounidenses habían matado al jefe militar talibán mulá Dadulá. Los talibanes habían jurado venganza. La muerte de Dadulá es considerada como el mayor golpe a los talibanes desde que fueron desplazados del poder en el 2001.

En el ínterin, los talibanes afirman en una página web que un “héroe muyaedín” fue el que atacó a la patrulla alemana en Kunduz. El autor del atentado era de la propia provincia de Kunduz, agregan.

Antes de este atentado en Kunduz, la misión alemana en Afganistán le había costado la vida ya a 18 soldados alemanesl. Diez de ello cayeron víctimas de atentados, ocho murieron en accidentes.

Los talibanes han amenazado con redoblar sus ataques contra las fuerzas extranjeras en Afganistán y dicen que han entrenado a cientos de atacantes suicidas.