El comportamiento de Trump, tras el atentado de Nueva York, fue indigno. Tildó vulgarmente a la Justicia de su país de “ridícula”. Sus reproches no son efectivos, opina Martin Ganslmeier.
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El terrorista se jactó de su acto abominable; solo lamentó no haber matado a más personas y quería colgar la bandera de Estado Islámico en su habitación del hospital. Poco después de que estom se supiera, Donald Trump escribió en Twitter y con letras mayúsculas, "PENA DE MUERTE” para los terroristas. Pero antes, Trump había calificado a la Justicia estadounidense de "ridícula” y de demasiado "blanda”,afirmando que sus molinos muelen demasiado despacio. En su opinión, sería necesario un juicio sumario o el internamiento en Guantánamo.
Trump tiene con seguridad buen olfato para los sentimientos primitivos de su país. No se puede descartar que vaya a ganar puntos con este tipo de declaraciones. Pero su comportamiento es absolutamente indigno de una democracia con una larga tradición en materia de Estado de derecho y una Constitución vigente desde hace 230 años.
Las críticas de Trump contradicen los hechos
Desgraciadamente, no es la primera vez que Trump ataca a la Justicia estadounidense o a algunos jueces. Cuando actúa así, se refuerza la impresión de que no le importan mucho ni la tradición del Estado de derecho ni la división de poderes de su país. De forma indirecta, Trump anima así a otros regímenes autoritarios. Al exigir que se lleve a cabo un juicio sumario y se aplique la pena de muerte, Trump no actúa en forma "estadounidense"; más bien parece un emperador romano, que en el coliseo señala con el pulgar hacia abajo.
Tras un atentado terrorista como el de Nueva York, un presidente debe unir al país y protegerlo de la histeria. George W. Bush visitó una mezquita deliberadamente poco después del 11 de septiembre para contrarrestar el sentimiento de venganza de la población estadounidense. Trump hace lo contrario: él azuza a sus seguidores, ampliando más la brecha en su país.
La sarta de críticas contra la Justicia de Estados Unidos contradice todos los hechos. La vía judicial democrática funciona mejor que Guantánamo. Tras el 11 de septiembre, más de 600 terroristas ya han sido condenados en procesos ajustados a derecho y encarcelados en Estados Unidos. El autor del atentado de Boston fue condenado a la pena de muerte tras dos años. Por el contrario, en Guantánamo solo ocho de los 700 presos han sido condenados hasta ahora.
Trump necesita que le refresquen la memoria
Trump no solo ha dañado con sus declaraciones el buen funcionamiento de la Justicia democrática, sino posiblemente haya ayudado a los terroristas. Con la declaraciones de Trump, la defensa de los terroristas puede alegar ahora que ya no es posible ningún proceso judicial justo, porque el jurado se sentirá presionado por el presidente de la nación. Trump prometió en su toma de posesión que "preservaría, protegería y defendería lo mejor posible la Constitución de Estados Unidos”. Sus consejeros deberían recordárselo.
Martin Ganslmeier (RMR/ER)
Autos y camiones como armas del terrorismo
No hacen falta bombas para sembrar el terror. Los ataques con vehículos motorizados lanzados contra transeúntes se han multiplicado desde el atentado cometido en Niza en julio de 2016. Un recuento de los casos.
Imagen: Reuters/A. Kelly
Nueva York: golpe en Manhattan
Un hombre embistió a varios transeúntes con un vehículo arrendado, en Manhattan. Ocho personas, entre ellas cinco turistas argentinos, murieron en el hecho, que las autoridades calificaron como un ataque terrorista. El conductor del vehículo fue herido por la policía y trasladado a un hospital.
Imagen: Reuters/A. Kelly
BARCELONA: atropello en las Ramblas
Trece muertos y cerca de 100 heridos fue el saldo que entregaron las autoridades de Barcelona después de que una furgoneta se adentró en las Ramblas, atropellando a varios transeúntes en el concurrido centro de la ciudad. El EI se adjudicó el atentado terrorista.
Imagen: Getty Images/AFP/P. Barrena
PARÍS: soldados en la mira
Seis soldados resultaron heridos el 9 de agosto cuando un vehículo embistió contra ellos en el barrio de Levallois-Perret, en las afueras de París. El departamento antiterrorista de la Fiscalía de París asumió la investigación. El principal sospechoso, un argelino de 36 años, fue detenido ese mismo día, resultando herido cuando intentó evitar su captura.
Imagen: Getty Images/AFP/P. Huguen
El puente de Londres
A comienzos de junio de 2017, tres atacantes atropellaron a tres personas en el Puente de Londres y luego acuchillaron a otras cinco en el Mercado de Borough. Los individuos fueron abatidos por la Policía. El Estado Islámico (EI) se adjudicó el ataque.
Imagen: Reuters/M. Djurica
LONDRES: el puente de Westminster
Cuatro transeúntes fueron atropellados en marzo de 2017 en el puente de Westminster. El atacante alcanzó a atacar con arma blanca a un policía que se hallaba frente al Parlamento británico, antes de ser abatido por las fuerzas de seguridad.
Imagen: Reuters/P. Nicholls
ESTOCOLMO: ataque en zona comercial
En abril de 2017, un camión ingresó a una calle peatonal en el centro de Estocolmo, atropelló a los transeúntes y se estrelló contra un centro comercial. Cinco personas murieron. La Policía detuvo a un uzbeko por el ataque.
Imagen: Getty Images/AFP/O. Andersen
Israel: la serie continúa
El 8 de enero de 2017, un grupo de militares israelíes bajaba de un autobús, cuando un camión se abalanzó contra ellos. Cuatro soldados murieron. El conductor, un palestino, fue abatido en el mismo lugar.
Imagen: picture-alliance/UPI/D. Hill
BERLÍN: Navidad enlutada
En uno de los tradicionales mercados de Navidad, el terrorismo golpeó a Alemania en diciembre de 2016. Doce personas murieron cuando un seguidor del EI lanzó un camión contra los asistentes al concurrido mercadillo en pleno centro de Berlín. Pocos días después, la Policía mató al tunecino de 24 años en un control cerca de la ciudad italiana de Milán.
Imagen: Getty Images/S. Loos
Columbus, Ohio: inspirado en el EI
El 28 de noviembre de 2016, el campus de la Universidad Estatal de Ohio fue escenario de un atentado perpetrado por un estudiante de origen somalí. El joven, de 18 años, atropelló a un grupo de peatones e hirió a varias personas con un cuchillo, siendo luego abatido por un policía. Según el FBI, el atacante se inspiró en la milicia terrorista
Estado Islámico (EI).
Imagen: Reuters/thelantern.com/C. Hass-Hill
NIZA: fiesta nacional ensangrentada
Una multitud celebraba en Niza la fiesta nacional de Francia el 14 de julio de 2016, cuando un camión se lanzó contra la gente. 86 personas murieron y más de 200 quedaron heridas. El EI reivindicó el atentado.