Trump evitó el pago de impuestos con operaciones "dudosas"
1 de noviembre de 2016
Los acreedores aceptaron intercambiar la deuda por acciones a precio superior al real para recuperar parte de la inversión. La maniobra fue desaconsejada por los asesores porque podría causar problemas con Hacienda.
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El diario New York Times vuelve a cuestionar la fiscalidad de Donald Trump al revelar que no declaró como ingresos, como marcaba la ley, cientos de millones de dólares en deuda perdonada por varios acreedores. El rotativo las califica de, cuanto menos, maniobras "legalmente dudodas".
Según el periódico el magnate inmobiliario forzó en 1990 a parte de sus acreedores a que aceptaran, para recuperar al menos algo de lo invertido, intercambiar la deuda por acciones corporativas de su imperio en bancarrota (que acababa de ser declarada en sus tres casinos de Atlantic City, en Nueva Jersey). Era una estratagema que sus asesores le habrían desaconsejado ya que el valor de los títulos era inferior al nominal.
The New York Times calcula la elusión de impuestos de Trump en decenas de millones de dólares, aunque la cifra real se desconoce. Expertos contables consultados por el rotativo cuestionaron la legalidad de la maniobra de Trump, que según ellos "no utilizó una rendija" del sistema, expresión utilizada por Trump, sino que "la llevó más allá".
Si bien Trump declinó hacer declaraciones, una portavoz de su campaña, Hope Hicks, aseguró que la información es o un "malentendido" por parte del periódico, o una "mala interpretación intencional de la ley". Y una crítica no sólo a Trump, sino a "todos los contribuyentes que se toman el tiempo y gastan dinero en tratar de comprender la intrincada y ambigua complejidad de las leyes fiscales para no pagar más que lo que deben". Según el periódico, era, efectivamente, una práctica habitual entre las grandes corporaciones para evitar el pago de impuestos. En 2004 el Congreso estadounidense eliminó el arreglo por el que se podía intercambiar deuda por acciones corporativas. "No hay noticia aquí", concluye Hicks.
LGC (EFE/NYT)
Los edificios más impopulares de Trump en todo el mundo
El catálogo de propiedades inmobiliarias de Trump generó beneficios para el candidato. Pero también dolores de cabeza. DW les ofrece una mirada crítica a algunos edificios que el millonario posee en todo el mundo.
Imagen: Getty Images/O.Kose
A la sombra de Trump en Las Vegas
A los demócratas no les agrada el hecho de que su primer duelo en televisión, en octubre de 2015, se realizara literalmente bajo la sombra de Trump. El Trump International Hotel and Tower de Las Vegas extiende su sombra más allá del Wynn Resort, donde se presentaron Hillary Clinton, Bernie Sanders y otros políticos. Durante el acto, Trump estuvo presente aunque no estuviese invitado.
Imagen: Getty Images/J.Raedle
Cuestión de gusto en Chicago
La indignación fue enorme cuando se supo que Trump pondría su nombre en su nuevo edificio de Chicago. El alcalde Rahm Emanuel incluso lo calificó como algo “kitch y de mal gusto”. Pero tras cinco años de pleitos legales, Trump consiguió que su nombre apareciese con enormes letras.
Imagen: Getty Images/S. Olson
Entre la suerte y la bancarrota
El Taj Mahal de Atlantic City, en el Estado de Nueva Jersey, costó mil millones de dólares. Trump era el propietario y después de 25 años el hotel y casino se declaró en suspensión de pagos. Una empresa de inversiones acudió al rescate y se quedó con la marca Trump. Sin embargo, su hotel hermano, el Trump Plaza de Atlantic City, no tuvo tanta suerte.
Imagen: Getty Images/W.T.Cain
El centro de operaciones de Trump
Donald Trump está especialmente orgulloso de su centro de poder en Nueva York. Sin embargo, el Trump Tower de la 5ª Avenida de Manhattan no es el centro de su campaña electoral, porque el millonario reside aquí con su familia. En el mismo edificio también tienen viviendas la estrella del fútbol Cristiano Ronaldo, el actor Bruce Willis o el compositor Andrew Lloyd-Webber.
Imagen: picture-alliance/AA
Un polémico símbolo de Nueva York
Con un atrio que ocupa seis plantas y gran cantidad de detalles en oro y mármol, algunos neoyorkinos consideran la torre Trump, en la Avenida 725, de mal gusto. Otros creen que es elegante y atemporal. Con interiores diseñados por Edward Barnes Larrabe y exteriores de Der Scutt, la torre se ha convertido en un imán para aficionados a la arquitectura contemporánea y para los partidarios de Trump.
Imagen: picture-alliance/dpa/S.Reboredo
Entre harapos y riqueza en Ciudad de Panamá
El Trump Ocean Club, en la Ciudad de Panamá, cuenta con hotel, 700 apartamentos y su club de yates. El edificio más alto de América Latina es reconocido por su singular silueta. La torre fue objeto de críticas por colindar con un barrio asolado por la pobreza, reduciendo el atractivo para posibles inquilinos. Para no perder más dinero, Trump vendió su nombre al magnate Roger Khafif.
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La resistencia escocesa
Aunque dice haber construido el "campo de golf más grande del mundo", como el magnate se refiere a su Trump International Golf Links, su construcción se retrasó porque el agricultor Michael Forbes se niega a vender la tierra que bordea el complejo. Durante su visita al campo en junio, Trump apoyó el "brexit" haciendo caso omiso del voto de Escocia por la permanencia en la UE.
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Erdogan versus Trump
Las Torres Trump de Estambul son los primeros edificios de Trump en Europa y se hicieron famosas por su enorme bodega de vino. Sin embargo, hubo peticiones de eliminar el nombre de Trump del rascacielos, cuya licencia fue concedida al millonario turco Aydin Dogan. Las opiniones de Trump sobre el islam han generado el rechazo de los musulmanes de Turquía, incluido el presidente Erdogan.