Donald Trump descartó enviar grandes contingentes de tropas de tierra a Siria, dijo en entrevista con Fox Business emitida mientras el secretario de Estado, Rex Tillerson, se reunía con Vladimir Putin en Moscú.
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"No iremos a Siria", dijo Trump. "Sinceramente, Putin está apoyando a una persona que es realmente malvada y creo que eso es muy malo para Rusia. Creo que es muy malo para la humanidad, es muy malo para este mundo", afirmó en referencia al presidente de Siria, Bashar al Assad.
Trump acusó además a Al Assad del uso de armas químicas, bombas barril y otros ataques contra civiles. "Sinceramente, ves los mismos niños sin brazos, sin piernas, sin cara. Es un animal", señaló.
Tensiones y mutuas acusaciones entre Rusia y Gran Bretaña
Por otra parte, Rusia acusó al Reino Unido de tratar de minar su cooperación con Estados Unidos sobre Siria y de buscar únicamente el derrocamiento del presidente sirio, Bachar al Asad.
"Parece que tienen ustedes miedo de que colaboremos con EE.UU. Hacen ustedes todo lo posible para socavar nuestra colaboración", dijo el embajador ruso, Vladimir Safronkov, a su homólogo británico, Matthew Rycroft, que previamente había hecho un discurso muy crítico hacia Moscú.
Safronkov denunció que el Reino Unido y Francia están apoyando a "grupos ilegales armados" en Siria y buscan solamente un cambio de régimen en el país. "Parece que para ustedes el cambio de régimen es más importante que lo que opina la mayoría de la comunidad internacional", insistió.
El representante ruso aseguró que tras el ataque de EE.UU. contra la base aérea siria de Shayrat ha habido una "escalada de la tensión" y, por ello, es "más importante que nunca impulsar la vía política" en Siria.
JOV (dpa, efe)
Alepo: el ocaso de una magnífica ciudad
Antes de la guerra, la ciudad era una metrópolis vibrante, el corazón económico y turístico de Siria. Ahora su parte oriental está sumida en ruinas. Mostramos la destrucción en unas imágenes del antes y el después.
La Mezquita de los Omeyas, antes
En 2010 los levantamientos de la "primavera árabe" no habían llegado a Siria y la famosa Mezquita de los Omeyas, construida en el año 715 y patrimonio de la humanidad, lucía en todo su esplendor.
Imagen: Reuters/K. Ashawi
La Mezquita de los Omeyas, después
En 2013 fue muy dañada por los combates. El 24 de marzo de ese año se desplomó su minarete. La mezquita tiene actualmente el aspecto de una ruina abandonada.
Imagen: Reuters/O. Sanadiki
Hamam El Nahasin, antes
Estos baños árabes en el casco antiguo de Alepo hacían todavía las delicias de los visitantes en el otoño de 2010. Aquí, la tranquilidad después del baño.
Imagen: Reuters/K. Ashawi
Hamam El Nahasin, después
Seis años después, el lugar ya no irradia paz ni invita a la relajación. Sólo muestra las huellas de la guerra.
Imagen: Reuters/O. Sanadiki
La ciudadela, antes
La ciudadela de Alepo es una de las fortalezas más antiguas y grandes del mundo. Gran parte del complejo data del siglo XIII.
Imagen: Reuters/S. Auger
La ciudadela, después
Lo que fuera una importante atracción turística está en gran parte destruida. Su silueta fantasmagórica sigue destacando sobre la parte antigua de la ciudad.
Imagen: Reuters/O. Sanadiki
El casco viejo, antes
El 24 de noviembre de 2008, en la parte antigua de Alepo la gente todavía se sentaba entre coloridas luces en los cafés.
Imagen: Reuters/O. Sanadiki
El casco viejo, después
El 13 de diciembre de 2016 sólo quedan escombros y ceniza.
Imagen: Reuters/O. Sanadiki
Centro comercial Shahba, antes
Adornos navideños colgaban en diciembre de 2009 del techo de uno de los mayores centros comerciales del país. Sus cinco pisos fueron construidos en 2008.
Imagen: Reuters/K. Ashawi
Centro comercial Shahba, después
"Cerrado permanentemente", es el mensaje que lee quien busca en Google el centro comercial Shahba. En 2014 fue duramente alcanzado por un ataque aéreo.
Imagen: Reuters/A. Ismail
El bazar de al-Zarab, antes
La entrada al bazar de al-Zarab en la parte antigua de la ciudad presentaba en 2008 su cálida luminosidad.
Imagen: Reuters/O. Sanadiki
El bazar de al-Zarab, después
En diciembre de 2016 la entrada al mercado está prácticamente destruida.