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Tras positivo por coronavirus de Trump, posibles escenarios

2 de octubre de 2020

Donald Trump anunció que se ha contagiado con coronavirus a cuatro semanas de las elecciones presidenciales. Surgen cuestiones constitucionales.

El presidente de EE. UU., Donald Trump.
El presidente de EE. UU., Donald Trump.Imagen: Reuters/C. Barria

Estados Unidos informó de 45.785 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas. Dos de ellos son el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su esposa, Melania.

¿Puede Trump continuar con sus asuntos oficiales?

Según sus propias declaraciones, el presidente de EE. UU. y la primera dama están en cuarentena en casa. Sin embargo, no está claro si Trump pasará su cuarentena en las habitaciones privadas de la Casa Blanca o seguirá trabajando en la oficina oval. Según un comunicado, su médico personal, Sean Conley, asume que Trump podrá continuar con su vida sin ningún problema: "Espero que el presidente continúe desempeñando sus funciones de manera ininterrumpida durante su recuperación", dijo Conley.

¿Trump enfermo de COVID-19?

Hope Hicks, asesora de Trump y quien posiblemente contagió al presidente y a su esposa. Imagen: Leah Millis/Reuters

En el caso de una infección por coronavirus asintomática, o de un transcurso leve de la enfermedad, es de suponer que la capacidad de trabajo del presidente de los EE. UU.  no se vería restringida. Sin embargo, eso podría cambiar si Trump desarrolla COVID-19 en el curso de su infección con el Sars-CoV-2. El propio Trump habló del COVID-19 en un tuit en el que dio a conocer su contagio, pero actualmente es poco probable que la enfermedad ya haya hecho eclosión en su organismo. De hacerlo, eso podría, en el peor de los casos, derivar en una neumonía potencialmente mortal.

¿Es Trump un paciente de riesgo?

El presidente tiene 74 años y es considerado un paciente de riesgo, simplemente por su edad. Cuando se hizo un chequeo de salud en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, en 2018, los médicos confirmaron que estaba bien. Sin embargo, los resultados también arrojaron que Trump, un fan declarado de la comida rápida, tiene sobrepeso y debería hacer más ejercicio. La obesidad también es uno de los factores de riesgo de COVID-19.

Ocho de cada diez muertos por COVID-19 en Estados Unidos son personas mayores de 65 años, según el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades. En EE. UU., las personas con COVID-19 del grupo etario de 64 a 74, tienen cinco veces más probabilidades de necesitar tratamiento hospitalario que las personas más jóvenes. Además, la tasa de mortalidad en ese grupo es 90 veces mayor que la de los adolescentes.

¿Qué pasa si Trump queda incapacitado?

Cuatro de los 45 presidentes de Estados Unidos han muerto hasta ahora durante su mandato. Si el presidente quedara incapacitado de asumir el cargo, o de continuarlo, el vicepresidente lo sustituiría. Ese fue el caso, la última vez, en 1963, después del asesinato del presidente John F. Kennedy, cuando Lyndon B. Johnson prestó juramento como nuevo presidente, pocas horas después del asesinato.

De momento, todos los actos electorales del presidente estadounidense se han suspendido.Imagen: Leah Millis/Reuters

Aquí es donde entra en juego la enmienda 25 de la Constitución estadounidense, que fue modificada de manera integral después del asesinato de Kennedy en 1967. Si el vicepresidente tampoco pudiera ejercer su cargo, en ese caso lo asumiría Nancy Pelosi, la jefa de la Cámara de Representantes.

¿Y qué sucederá si Trump ha infectado a Biden?

Si Trump fue infectado por su asesora inmediatamente antes del debate televisivo, es poco probable que haya infectado a su rival, Joe Biden, durante el acto. El 3 de noviembre, la fecha de las elecciones, el COVID-19 de ambos candidatos no cambiaría nada, al menos por el momento.

Si un partido se quedase sin su candidato, por cualquier motivo, tendría que encontrar un reemplazo. El lugar en las listas electorales en los estados de Estados Unidos pertenece al partido y no está vinculado a una persona.

Si no hubiera candidatos antes de las elecciones, sería el turno de los comités del partido. Para los demócratas, el Comité Nacional Demócrata (DNC), y para los republicanos, el Comité Nacional Republicano (RNC), que decidirían quién se postulará para ellos el 3 de noviembre. No hay un nominación automática del candidato a vicepresidente en este contexto. Este cargo solo se otorga después de la elecciones.

Sin embargo, si un partido nomina a un nuevo candidato a las elecciones, posiblemente habrá dificultades legales. Dado que el voto por correo ya comenzó, los ciudadanos ya habrían votado por un candidato que finalmente no se presentó a las elecciones.

¿Qué pasará ahora con la campaña electoral?

La campaña electoral republicana está totalmente adaptada a Donald Trump y sus mitines. El presidente de Estados Unidos ha estado omnipresente en los medios de comunicación en las últimas semanas, al contrario que su rival, Joe Biden.

Después de su positivo por coronavirus, Trump ya no puede realizar mítines hasta nuevo aviso. Para la campaña electoral republicana, un mes antes de las elecciones, este es un serio revés.

(rmr/cp)

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