Tipo de proyecto: electromovilidad
Autonomía y velocidad: 80 kilómetros por carga de batería, máximo 50 kilómetros por hora
Reducción de emisiones de CO2: alrededor de 9 toneladas por año y vehículo
Inicio del proyecto: en servicio en el transporte público holandés a nivel local desde marzo de 2010

Tres ruedas, un eje, un motor de dos tiempos: el "tuk tuk", la versión económica de un verdadero automóvil. Un modelo que tan sólo ha podido imponerse con éxito en países en vías de desarrollo, sobre todo en Tailandia, la India y África. Pero una nueva versión con motor eléctrico de esta motocicleta con más de medio siglo de vida pretende ahora dar el salto al mercado europeo. En Amsterdam, Rotterdam y La Haya circulan ya como transporte público.

Fue un holandés quien tuvo la idea de importar los "tuk tuks". Pero, sobre todo, lo que hizo fue trabajar en un nuevo concepto de triciclo motorizado para adaptar el contaminante "tuk tuk" en servicio en los países en vías de desarrollo al moderno enfoque de los transportes en Europa. Su idea derivó en un proyecto de investigación en el que también participaron diversas universidades. Los elementos de la carrocería del "tuk tuk" eléctrico proceden de Tailandia, mientras que el motor se fabrica en Estados Unidos y la batería se importa desde Alemania. El objetivo es que los "tuk tuks" eléctricos se empleen sobre todo en el transporte público a nivel local. Actualmente, hay un proyecto piloto en marcha en Holanda.

Hasta ahora, los fabricantes ofrecen tres variantes del triciclo ecológico: el "Classico", con capacidad para tres pasajeros; el "Cargo", destinado al reparto de mercancías; y el modelo "Limo", equipado con seis plazas y promocionado como transporte VIP.

Los "tuk tuks" ecológicos se distribuyen ya en Bélgica, España y Alemania, y pronto se podrán encontrar en Suiza. También en Berlín circulan algunas unidades de los exóticos vehículos eléctricos. Hasta ahora, sin embargo, tan sólo bajo la modalidad de alquiler. Y es que la ley impide, de momento, su utilización como taxis. Para ello, necesitarían cuatro ruedas, cuatro puertas y, sobre todo, dos ejes. Los proveedores confían en obtener una autorización especial.

Un reportaje de Judith König