Turquía aprueba ley para censurar contenido en redes
29 de julio de 2020
El Parlamento turco aprobó este miércoles una polémica ley que cede a las autoridades un mayor control de los usuarios de redes sociales y les permite censurar contenidos.
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La enmienda, impulsada por la formación gubernamental islamista Partido de Justicia y Desarrollo (AKP), ha sido aprobada en la madrugada de este miércoles (29.07.2020) con el apoyo de su aliado parlamentario, el ultranacionalista Partido de Movimiento Nacionalista (MHP).
La normativa obliga a las empresas de redes sociales a designar a un representante y a mantener sus servidores en Turquía.
Las compañías deberán almacenar datos de los usuarios en el país euroasiático y se establece un plazo de 48 horas para eliminar contenido que las autoridades consideren "ofensivo".
En el caso de no cumplir con sus obligaciones podrían enfrentarse a multas de entre 1.500 y un millón de dólares.
Los principales partidos opositores, así como varias ONG defensoras de los derechos humanos y asociaciones de periodistas se oponen a la reforma al considerarla "anticonstitucional".
Advierten de que la medida puede llevar a un mayor control y censura de la ciudadanía.
"Esta enmienda aumentará significativamente los poderes del Gobierno para censurar contenido en la red y procesar a los usuarios de redes sociales", señaló en un comunicado Andrew Gardner, portavoz de Amnistía Internacional en Turquía.
Durante el debate parlamentario, miles de usuarios publicaron mensajes en Twitter bajo la etiqueta "Paren la ley de censura".
El Gobierno argumenta que la ley es necesaria porque las compañías tecnológicas no han tomado medidas contra actividades como el acoso sexual, los juegos de azar ilegales, fraudes y apoyo al terrorismo.
El AKP ya había advertido antes de que pretendía introducir medidas legales para mantener bajo control a los gigantes de las redes sociales como Twitter, Facebook y YouTube al obligarlos a eliminar contenido o asumir fuertes multas.
Entre 2014 y 2019, el Gobierno turco ha ordenado el cierre de unas 27.000 cuentas en redes sociales y cerca de 246.000 páginas web, según un estudio de la Universidad turca de Bilgi y la Asociación de Libertad de Expresión (IFOD).
En enero se pudo volver a acceder desde Turquía a la enciclopedia digital Wikipedia tras casi tres años de prohibición, después de que el Tribunal Constitucional considerara que el bloqueo atentaba contra los derechos recogidos en la Carta Magna.
Turquía ocupa el puesto 154 de un total de 180 países en el índice de Reporteros Sin Fronteras sobre libertad de prensa, y ha detenido a decenas de periodistas bajo acusaciones genéricas como apoyo al terrorismo, según denuncian ONG de defensa de derechos humanos.
CP (efe, rtr)
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Santa Madre Sofía de Estambul: catedral, mezquita y museo
Hace unos 1500 años se construyó la "Santa Sabiduría", o Hagia Sophia, con su enorme cúpula y las cuatro torres. La antigua iglesia fue luego mezquita y posteriormente un museo. Ahora volverá a ser templo musulmán.
Imagen: picture-alliance/Marius Becker
Hito arquitectónico
En 532, el emperador romano Justiniano, que residía en Constantinopla, dio la orden de construir una iglesia poderosa "como no ha existido ni existirá desde los tiempos de Adán". Unos 10.000 trabajadores se pusieron a trabajar. 15 años más tarde se inauguró la obra, sin decoraciones. Durante un milenio, la basílica abovedada siguió siendo la iglesia más grande de la cristiandad.
Imagen: imago/blickwinkel
Arquitectura monumental como instrumento religioso
Se dice que Justiniano invirtió 150 toneladas de oro en la construcción de la Santa Madre Sofía. Aunque la construcción tuvo que ser mejorada. La cúpula era demasiado plana y se derrumbó durante un terremoto. La Hagia Sophia, en castellano: "santa sabiduría", pronto fue usada como iglesia estatal. Desde mediados del siglo VII casi todos los gobernantes bizantinos fueron coronados aquí.
Imagen: Getty Images
Sultán Mehmed II, el Conquistador
El dominio bizantino sobre Constantinopla terminó en 1453: el sultán otomano Mehmet II conquistó la ciudad y convirtió la Santa Sofía en mezquita: las cruces dieron paso a la luna creciente, las campanas y los altares fueron destruidos o desmantelados, los mosaicos y los murales fueron encalados. El primer minarete también le dio al edificio un rostro musulmán en el exterior.
Imagen: public domain
Mustafa Kemal Ataturk, el padre de la Turquía moderna
El fundador del Estado turco, Mustafa Kemal Atatürk, finalmente hizo de la Hagia Sophia un museo en 1934. La secularización fue acompañada por un extenso trabajo de restauración. Los mosaicos bizantinos fueron descubiertos de nuevo. Se tuvo cuidado de no destruir los posteriores accesorios musulmanes.
Imagen: AP
Iconos bizantinos
El mosaico más magnífico de Santa Sofía es una pintura devocional del siglo XIV, que fue descubierta en la pared de la galería sur. Aunque no está completamente preservado, las caras son claramente visibles: En el centro está Jesús como el gobernante del mundo, María a su izquierda y Juan a su derecha.
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El Islam y el Cristianismo, de igual a igual
La agitada historia de Santa Sofía es familiar para el visitante de hoy en día a cada paso: las inscripciones "Mahoma" (izquierda) y "Alá" (derecha) flanquean a la Virgen María con el niño Jesús en su regazo (espalda). Santa Sofía es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 1985.
Imagen: Bulent Kilic/AFP/Getty Images
Patriarca Bartolomé I
Bartolomé I, Patriarca de Constantinopla y jefe honorario de todos los cristianos ortodoxos, también reclamó la Hagia Sophia. Durante años ha pedido que la Basílica sea reabierta para la liturgia cristiana. "Santa Sofía fue construida para dar testimonio de la fe cristiana", argumenta.