Los representantes de Ucrania y Rusia reunidos en Berlín este viernes (26.09.2014) alcanzaron un principio de acuerdo para resolver la disputa por el gas que afecta a ambos países y que podría repercutir en el suministro que requiere Europa occidental. De esta forma, se busca garantizar el suministro para el invierno, cuando es vital para enfrentar las bajas temperaturas.

“Se han sentado las bases para un paquete de invierno para asegurar el suministro de gas a Europa desde este invierno hasta la primavera (boreal)", informó el comisario de Energía de la Unión Europea, Günther Oettinger, que participó como mediador en la nueva ronda de negociaciones entre los ministros de Energía de Rusia, Alexandr Novak (en la foto), y Ucrania, Yuri Prodan. “Creo que es una solución viable”, añadió Oettinger.

El acuerdo establece que Ucrania pagará los próximos seis meses un precio de 303 euros por mil metros cúbicos de gas, al tiempo que se comprometió a cancelar antes de fin de año los 3.100 millones de euros que le debe a la empresa rusa Gazprom por consumos previos. El pago se dividirá en dos cuotas, una que debe ser saldada antes que comience noviembre, y la otra antes que termine este año.

Europa depende del acuerdo

Gazprom exige a Ucrania 4.458 millones de dólares por las deudas por suministros de gas. Esta cantidad está lejos de los 3.100 millones de dólares que Ucrania pagará. Sin embargo, Kiev se ha mostrado dispuesta a hacer frente a la diferencia que exista una vez que salga el fallo del Tribunal de Arbitraje de Estocolmo, que resuelve la disputa que mantienen ambos países por el precio del gas.

La solución alcanzada este viernes busca ser una medida provisional hasta que eso ocurra. Sin embargo, debe ser aprobada todavía por los gobiernos de Moscú y Kiev antes de fines de la próxima semana, detalló Oettinger. Luego de ello, se celebrará otro encuentro en la capital alemana para cerrar las negociaciones. En caso de que fracase el acuerdo, Ucrania seguirá sin recibir abastecimiento desde Rusia y esto podría extenderse también a Europa occidental, tal como ocurrió en la llamada “guerra del gas” de 2009.

DZC (dpa, EFE)