En la primera sesión de su nuevo mandato, la Eurocámara acordó pedir más sanciones contra los responsables de violaciones a derechos humanos en Venezuela y le llamó la atención a Washington por el trato a los migrantes en la frontera con México. No cuesta imaginar que esos dos temas ocuparán a lo largo de todo su mandato (2019-20124) a los diputados europeos de todo el espectro político, sobre todo a los que tendrán que ver más estrechamente con las relaciones con América Latina.

Contundencia para Venezuela

"Lo primero que hay que señalar es la contundencia con la que se aprobó la resolución sobre Venezuela, con 485 votos a favor y sólo 85 en contra”, dice a DW Leopoldo López Gil, eurodiputado por España del bloque conservador, el más numeroso.

"Es un texto muy completo pues a la vez que pide a la UE que imponga más sanciones individualizadas, urge al gobierno de Venezuela a que continúe en las negociaciones promovidas por Noruega en Barbados. Apoya tanto el esfuerzo del Grupo de Contacto como el del Grupo de Lima” dice López Gil, miembro de la Asamblea Euro-Latinoamericana (Eurolat).

La búsqueda de una solución pacífica a través de elecciones libres y transparentes es el punto de consenso en la Eurocámara. Eso sí, no faltan voces que, desde un extremo, no verían con malos ojos una intervención y, desde otro, acusan a la UE de ingerencia y de seguidismo hacia Estados Unidos. 

"Nos preocupa mucho la renovada aplicación de la doctrina Monroe por parte de Washington en su ´patio trasero´”, dice a DW Manu Pineda, eurodiputado del bloque de la izquierda. De especial preocupación para Pineda es la "lawfare”, la guerra jurídica, contra líderes latinoamericanos. "En Venezuela no solo hay peligro  de guerra jurídica sino un riesgo serio de intervención. Eso haría reventar la paz de toda la zona”, apunta.

Migración y fronteras

La votación con la que aprobó la llamada de atención a Estados Unidos por el trato a los migrantes en su frontera (330 a favor, 252 en contra), si bien refleja interés en el programa migratorio y los derechos humanos, también denota cuidado en las puntadas que se dan en la relación con Washington.

"Es una situación complicada y debemos abordarla como un reto global”, dice a DW Izaskun Bilbao, eurodiputada de Renew Europe, el bloque liberal, el tercero más grande de la Eurocámara. Bilbao, en su tercer mandato consecutivo, integra también Eurolat –la instancia de diálogo legislativo entre ambos continentes- y la delegación para la relación con los países andinos. 

"No es solamente un problema de Estados Unidos y América Central y México. Es también europeo. Y tenemos que adoptar medidas con visión humanista, pensando en la dignidad de las personas que marchan”, acota Bilbao. En su opinión, el mayor reto que plantea la migración es "cómo mejorar la democracia de los países de origen de esos migrantes y lograr un desarrollo económico sostenible acompañado de un modelo social”.

"Compartimos la crítica a la barbaridad que está sucediendo en la frontera con México”, señala Pineda. "Pero recalcamos que esa gente está huyendo de la miseria y de guerras provocadas, en su mayoría, por nosotros, por el ´primer mundo´. Si en la frontera con México han muerto 400, en el Mediterráneo han muerto más de dos mil en el último año”, subraya Pineda. 

"Hay que enfocar  las causas de esas migraciones”, afirma López Gil. "Vamos a empeñarnos en aumentar la asistencia inmediata, tanto material como psicológica, para que esa gente tan vulnerable recupere la dignidad”, agrega, enfocándose en el caso de la migración de Venezuela hacia Colombia.

Colombia, proceso de paz

Pero no es solo el éxodo venezolano lo que preocupa a los eurodiputados en cuanto a Colombia.

"Los 135 ex combatientes de las FARC asesinados desde la firma del acuerdo, los desaparecidos y los casi 600 activistas sociales asesinados nos preocupan mucho; y  también que la UE esté enviando fondos para que se implementen los acuerdos y no haya suficiente seguimiento", aduce Pineda.

"El proceso de paz de Colombia está lleno de complejidades”, apunta por su parte López Gil, enfocando el incremento de los cultivos ilícitos. "Habrá que esforzarse en vigilar no solo la producción sino la exportación y los fondos que provienen de esa actividad”, prevé.

Por otra parte, "apostamos por el proceso de paz y por el contenido del acuerdo que se suscribió”, recuerda Bilbao. "Sabemos que es una tarea complicada, pero las instituciones europeas, incluida la Alta Representante, han tenido implicación total en ellos y creo que deberíamos seguir apostando firmemente por cumplirlos”, añade la eurodiputada.

A estos grandes temas que con seguridad entrarán en las agendas de las relaciones con América Latina, los eurodiputados agregarían, poniendo el acento según su color político, algunos más: la situación en Nicaragua y Cuba; la destrucción de la Amazonía y la Orinoquía, la vulnerabilidad de los pueblos indígenas, la implementación de los acuerdos comerciales…

"No hemos fijado aún las prioridades para este mandato”, dice Bilbao. "Pero queda claro que desde Eurolat nos empeñaremos en abordar con carácter global los retos comunes a los que se enfrentan la Unión Europea y América Latina”, concluye.

* Empresario y político, y padre del opositor venezolano que lleva su mismo nombre, Leopoldo López Gil emigró de Venezuela en 2014 y en 2015 le fue concedida la nacionalidad española. 

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