Los jefes de estado y de gobierno de la Unión Europea (UE) expresaron tras la cumbre realizada hoy en Bruselas su "seria y creciente preocupación" por el programa atómico iraní.

En una declaración dada a conocer en la noche del lunes, el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, se refirió a las nuevas sanciones aplicadas a Teherán la semana pasada.

"Estas medidas no se dirigen al pueblo iraní", indicó. La UE resolvió un embargo petrolero y el congelamiento de todas las cuentas del banco central iraní, entre otras medidas.

Van Rompuy también hizo referencia al conflicto en Siria, sobre el que expresó la "gran preocupación" europea por la represión a la población. El presidente del Consejo Europeo dijo que "urge" una "indispensable" y rápida reacción del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

El funcionario sostuvo que todos los miembros del Consejo de Seguridad, en donde Rusia y China se oponen a una resolución contra Siria, deberían "hacerse cargo de su responsabilidad".

dpa