Agricultor descubre una losa egipcia de la época bíblica
24 de junio de 2021
Un agricultor en Egipto ha descubierto una estela de 2.600 años de antigüedad erigida por el faraón Apries, que gobernó entre el 589 y el 570 antes de Cristo.
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Un agricultor que vive cerca de la gobernación egipcia de Ismailia hizo el descubrimiento de su vida cuando descubrió, mientras preparaba su tierra para el cultivo, una losa de arenisca intrincadamente tallada que parece haber sido instalada por el faraón Apries hace 2.600 años, informó Live Science, citando al Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto.
La piedra en pie –también conocida como estela– mide 230 centímetros de largo y 103 de ancho. Presenta una talla de un disco solar alado y un cartucho, o un óvalo que encierra jeroglíficos egipcios, que representa a Apries, quien gobernó aproximadamente de 589 a.C. a 570 a.C.
Actualmente no está claro qué dicen los jeroglíficos. Sin embargo, actualmente se estima que se refiere a una campaña militar que el faraón llevó a cabo al este de Egipto, según el secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades, Mostafa Waziri, informó el sitio.
El antiguo historiador griego Heródoto (que vivió entre el 484 y el 425 a.C.) afirmaba que Apries libró una guerra perdida contra los fenicios que dejó muchos soldados egipcios muertos y desencadenó una guerra civil en Egipto que acabó con la muerte de Apries y su sustitución como faraón por un hombre llamado Amasis. No está claro si esta estela arrojará nueva luz sobre estos acontecimientos.
FEW (Live Science, Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto)
Arqueólogos presentan la "Ciudad Dorada Perdida de Luxor"
Las excavaciones en Egipto han desenterrado un hallazgo sensacional: los restos de una ciudad que se remonta a la edad de oro de los faraones, hace más de 3.000 años
Imagen: Ministry of Tourism and Antiquities/Xinhua/picture alliance
La ciudad antigua más grande desenterrada en Egipto
Según los expertos, la antigua ciudad es la más grande jamás descubierta en Egipto. Data de la época del rey Amenhotep III, que gobernó el país entre 1391 y 1353 a. C., detalló Zahi Hawass, el arqueólogo egipcio que dirigió la expedición. "Muchas misiones extranjeras buscaron esta ciudad y nunca la encontraron", expresó el también exministro de Antigüedades.
Imagen: Xinhua News Agency/picture alliance
Objetos cotidianos
Piezas de joyería, vasijas de cerámica de colores y ladrillos de arcilla con sellos de Amenhotep III confirmaron la datación, explicaron los arqueólogos. Betsy Bryan, profesora de egiptología en la Universidad John Hopkins, considera que el descubrimiento de la ciudad perdida es el segundo descubrimiento arqueológico más importante desde la tumba del faraón Tutankamón, hace casi 100 años.
Imagen: Xinhua News Agency/picture alliance
Escondido bajo la arena del desierto
Esta foto del 8 de abril de 2021 muestra el esqueleto de un animal que estuvo enterrado bajo la arena del desierto durante milenios. Fue descubierto durante la excavación de siete meses en la "Ciudad Dorada Perdida" en Luxor.
Imagen: Ministry of Tourism and Antiquities/Xinhua/picture alliance
Intactos por milenios
Las excavaciones comenzaron en septiembre de 2020 entre los templos de Ramsés III y Amenhotep III, cerca de la ciudad de Luxor, a unos 500 km al sur de la capital El Cairo. En pocas semanas y para sorpresa de todos, el equipo encontró muchos ladrillos de adobe, una "ciudad grande y bien conservada, con muros casi completos y habitaciones llenas de cosas cotidianas", revelaron los arqueólogos.
Imagen: Xinhua News Agency/picture alliance
También esqueletos humanos
El equipo también desenterró varios vecindarios y descubrió una panadería con hornos y almacenamiento de cerámica, así como barrios administrativos y residenciales. La ciudad dará "un raro vistazo a la vida de los antiguos egipcios en la época en la que el imperio tenía su mayor riqueza", señaló Bryan.
Imagen: Xinhua News Agency/picture alliance
Desfile de oro de los faraones
A este magnífico hallazgo se suma que hace pocos días la momia de Amenhotep III fue conducida ceremoniosamente por El Cairo en un magnífico carro y en medio de una procesión con otros 21 reyes y reinas del antiguo Egipto. El objetivo: llevarlos al recién construido Museo Nacional de la Civilización Egipcia (NMEC).