Mientras en la Champions League el Bayern Múnich, con su victoria 2-1 en casa sobre el AC Florencia, conserva viva la esperanza de obtener para Alemania un importante título internacional de clubes, sus colegas de la Bundesliga en la Liga Europa marchan con pasos menos seguros.

Werder Bremen

El finalista del año pasado de la Copa UEFA, hoy Liga Europa, sufrió un duro revés en Holanda, ante el Twente Enschede, al perder por 1-0, resultado que limita sus opciones de acceder al cuadro de octavos de final de la competencia.

El peruano Claudio Pizarro, principal arma ofensiva del club alemán, lució fuera de forma y desperdició la más clara opción de anotar para el Bremen, equipo que sin él no encuentra soluciones ante el arco rival.

No sólo la afición se siente frustrada con la presentación del Bremen, que ahora deberá jugarse el todo por el todo para poder conservar su cupo en la gran tribuna del fútbol europeo, también el entrenador Thomas Schaaf criticó severamente a sus futbolistas: “ese no es el rendimiento que nosotros esperamos”, dijo.

Wolfsburgo

En casa el defensor del título alemán está muy lejos de reeditar su gran campaña de la temporada pasada; en Europa, en cambio, el Wolfsburgo -que estuvo a punto de sostenerse en la Champions League- se muestra sólido, en especial gracias a la brillante actuación del goleador de la Bundesliga en el 2009, Grafite.

El delantero brasileño se encargó, casi en solitario, de poner al Villarreal de España contra la pared, y no faltó mucho para que los dos goles que anotó se tradujeran en una victoria de visitante, lo que al final no se dio pues el resultado final fue un empate (2-2) positivo, con el cual prácticamente el Wolfsburgo puso un pie en la siguiente ronda.

Grafite está haciendo historia en las competencias europeas, ya en la Champions League había logrado tres goles en un partido, esta vez fueron dos.

Hertha Berlín

El último del campeonato alemán tiene el honor –o la mala fortuna, según cómo se vea- de medirse a algunos de los mejores clubes europeos; esta semana el rival que visitó la capital de Alemania fue un club portugués de gran prestigio: el Benfica Lisboa.

Pese a la fama del huésped, la afición castiga a su equipo por los malos resultados y le da la espalda dejando las tribunas del imponente Estadio Olímpico vacías, apenas 13.000 espectadores asistieron al partido, lo que significó 61.000 sillas desocupadas.

El empate 1-1 fue un reflejo fiel de los problemas del Berlín para anotar, en este caso ambos goles fueron autoría de los portugueses, el primero a su favor, el segundo en su propia valla. El club de la capital alemana tiene opciones de continuar en competencia, pero el reto es muy grande, pues debe marcar aunque sea un gol en Lisboa.

Hamburgo

Entre los alemanes el único que consiguió una victoria, 1-0 sobre el PSV Eindhoven de Holanda; ella es, de todas formas, demasiado magra para alimentar la euforia en las filas del Hamburgo. El gol de penal obtenido por el jugador de la selección de Alemania, Marcell Jansen, fue un botín insatisfactorio pues no otorgó la seguridad que se requiere para el juego de vuelta.

La mejor noticia para el Hamburgo fue el regreso del brasileño Zé Roberto a las competencias europeas, su ingreso -a media hora de finalizar el partido- revitalizó al equipo y se confía que para el compromiso en Holanda pueda jugar los 90 minutos, lo cual también vale para la súper estrella Ruud van Nistelrooy, quien debe aportar los goles.

Autor: Daniel Martínez

Editor: Enrique López