Un turista australiano de 24 años recibió hoy una cornada grave en un muslo durante el segundo encierro de toros de los Sanfermines, que dejó otros siete heridos en las calles del centro de Pamplona, en el norte de España.

El joven fue empitonado en la plaza de toros, al final del encierro, por un animal que había quedado rezagado.

Según informaron los servicios sanitarios, el australiano tuvo que ser intervenido en la enfermería del coso taurino, ya que la cornada le afectó a la vena safena. Después fue trasladado un hospital. Su estado es grave, pero no se teme por su vida.

Otro turista, en este caso un estadounidense de 22 años, sufrió durante el encierro el puntazo leve de un toro en una pierna y fue trasladado a un centro sanitario. El resto de los heridos fueron atendidos por contusiones y traumatismos.

El segundo encierro de los Sanfermines fue rápido: los seis toros de la ganadería Cebada Gago recorrieron los 825 metros en poco más de tres minutos. Los momentos de peligro los protagonizó el astado que corneó al turista australiano, un toro colorado que quedó pronto descolgado tras haber resbalado.

Desde el jueves y hasta el próximo 14 de julio, cada mañana se repiten los encierros en las calles del centro histórico de la capital de Navarra, que estos días ve incrementada notablemente su población, de unos 200.000 habitantes, por la intensa afluencia de turistas que acuden a las fiestas.

dpa