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Una-cerveza@por-favor.net

4 de septiembre de 2003

Las terrazas de dos cervecerías de Munich ponen en marcha un proyecto para navegar por la red al aire libre, con un portátil y medio litro de cerveza. AOL también quiere infiltrarse en los bares de moda.

Biergarten en ColoniaImagen: DW

Una organización de internautas de Munich pretende dar un giro a la tradición de las terrazas en las cervecerías para convertirlas en centros de alta tecnología donde se pueda escribir Emails. Dos terrazas han instalado una red LAN sin cable en la capital bávara. Los clientes de la Torre China y de la Casa del Mar sólo necesitan para navegar una tarjeta LAN sin cable y un portátil.

Esta acción esta dirigida un grupo que se siente más creativo cuando están disfrutando del buen tiempo y del aire fresco. Además también para viajeros y turistas que quieran echar un vistazo a su Email rápida y fácilmente. El proyecto piloto ofrece acceso gratis a e-garten.net, una comunidad virtual creada exclusivamente para este proyecto. Entre los patrocinadores del proyecto, que se llevó a cabo en tan solo dos meses, figuran nombres importantes como Intel y Telego.

Imagen: DW

La federación se muestra muy optimista en cuanto a las posibilidades de éxito del proyecto. Sobre todo opinan que navegar en una terraza es una manera de mostrar lo que nos depara el futuro. Mostrará el potencial de la tecnología WLAN sin cable.

AOL contraataca

Los juguetes electrónicos suponen la nueva atracción de los bares y clubes de moda en Alemania. AOL se ha lanzado a la conquista de nuevos clientes con su nueva estrategia de marketing a través del sistema WLAN que conecta computadoras portátiles a través de ondas de radio. Estos puntos públicos de acceso a Internet se han bautizado como "Hotspots". AOL ofrece 150 Hotspots en 30 ciudades alemanas. En esta nueva andadura de la tecnología, pese a los pronósticos optimistas, se han levantado ya quejas contra AOL. En Hamburgo se instalaron 40 WLAN Hotspots en bares juveniles y los propietarios se quejan de que los jóvenes pasan horas mirando la pantalla sin pedir una copa lo que supone una pérdida para el local.